La Comisión de Servicios Públicos del Estado de Nueva York (Public Service Commission, PSC, por sus siglas en inglés) ha aprobado la línea de transmisión submarina y subterránea de 1.250 MW que llevará energía limpia y renovable desde la frontera canadiense hasta la ciudad de Nueva York (NYC).
El 14 de abril, la PSC aprobó el contrato entre el productor de energía renovable Hydro-Québec y la Autoridad de Investigación y Desarrollo Energético del Estado de Nueva York (NYSERDA) para el proyecto Champlain Hudson Power Express (CHPE).
Con la aprobación final, el socio estadounidense de Hydro-Québec, Transmission Developers Inc. (TDI), comenzará la construcción de la línea en el verano de 2022 y su puesta en servicio está prevista para 2025.
Como se ha revelado, la línea de transmisión ya ha obtenido todas las aprobaciones federales y estatales necesarias para su construcción e Hydro-Québec y TDI revisarán el detalle de la orden completa una vez que haya sido publicada por la PSC.
La aprobación es el resultado de un proceso de un año de duración que incluyó una solicitud de propuestas (RFP) y un proceso de selección por parte de la NYSERDA, seguido de un extenso proceso de revisión por parte de la PSC y un periodo de comentarios públicos, durante el cual se presentaron cerca de 4.000 declaraciones en apoyo de la CHPE.
“Todos podemos estar muy orgullosos hoy. Los neoyorquinos han elegido la energía hidroeléctrica limpia de Quebec para abastecer el 20% de las necesidades de electricidad de la mayor ciudad de Estados Unidos”, ha declarado Sophie Brochu, presidenta y consejera delegada de Hydro-Québec. “Este proyecto, un modelo de transición energética equitativa, es un ejemplo elocuente de cómo podemos trabajar juntos para descarbonizar el noreste de Estados Unidos”.
Como resultado de la decisión de la PSC, el Consejo Mohawk de Kahnawà:ke, una comunidad indígena situada al sur de Montreal, e Hydro-Québec finalizarán su acuerdo de propiedad compartida de la línea de transmisión en la provincia de Québec, que se conectará a la CHPE.
Energía limpia para la Gran Manzana
La CHPE consiste en la construcción de una línea de transmisión subterránea y submarina de aproximadamente 339 millas (unos 545 kilómetros) entre la frontera entre Canadá y Estados Unidos y la ciudad de Nueva York.
En Québec, el proyecto implica la construcción de una línea de transmisión de aproximadamente 58 kilómetros entre la subestación de Hertel, en La Prairie, y un punto de interconexión con la CHPE en el Rivière Richelieu, en la frontera entre Canadá y Estados Unidos.
El proyecto de la línea Hertel-New York se someterá al procedimiento provincial de evaluación y revisión del impacto ambiental, informó Hydro-Québec.
Según los promotores, se espera que el proyecto contribuya a la eliminación progresiva de las centrales eléctricas de combustibles fósiles existentes y suministre energía asequible reduciendo los costes en todo el estado en más de 17.000 millones de dólares durante los primeros 25 años de funcionamiento.
Según el análisis de la NYSERDA, la CHPE reducirá las emisiones de carbono en todo el estado en 37 millones de toneladas métricas, el equivalente a retirar más de medio millón de coches de la carretera.
También contribuirá en un 28% a alcanzar el objetivo de reducción de gases de efecto invernadero de la ciudad de Nueva York para 2030, al tiempo que aportará 189 millones de dólares en beneficios medioambientales y comunitarios en todo el Estado de Nueva York.
Noticia tomada de: Offshore Energy / Traducción libre del inglés por World Energy Trade
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