La tormenta tropical Beryl tendría escaso impacto en la producción de petróleo y gas en alta mar de Estados Unidos, dijeron el viernes las compañías energéticas, al tiempo que evacuaban al personal de algunas instalaciones por precaución.
Beryl se degradó de huracán y se desplazaba el viernes sobre la península de Yucatán, en México, con vientos máximos sostenidos que bajaron a 113 km/h, dijo el Centro Nacional de Huracanes estadounidense.
La producción en alta mar del Golfo de México, de unos 1.8 millones de barriles diarios, representa alrededor del 14% de la producción total de crudo de Estados Unidos, según datos de la Administración de Información Energética del país.
Cualquier repercusión en el suministro podría hacer subir los precios del petróleo estadounidense y del crudo de alta mar.
La petrolera Chevron Corp, una de las mayores productoras de crudo en alta mar del país, informó que la producción de sus activos operados se mantuvo en niveles normales, y agregó que evacuó a trabajadores no esenciales de algunas de sus instalaciones en el Golfo de México.
La compañía señaló que había desmovilizado al personal de su proyecto Anchor, cuya primera producción está prevista para el tercer trimestre.
El productor Murphy Oil Corp dijo que no esperaba ningún impacto en las operaciones y no había evacuado a empleados. Hess Corp reportó que no esperaba ningún impacto en sus instalaciones del Golfo.
Por su parte, Occidental Petroleum señaló que estaba monitoreando la trayectoria de la tormenta, y agregó que tenía planes de preparar las instalaciones para eventos relacionados con el clima.
El jueves, Shell comunicó que había evacuado al personal de sus instalaciones de Perdido, en el Golfo, y que había interrumpido la producción de forma segura.
En sus instalaciones de Whale, que no está previsto que empiecen a funcionar hasta finales de año, evacuó a todo el personal. Se interrumpieron algunas operaciones de perforación en la zona.
Los mercados de gasolina y gasóleo de Texas están bien abastecidos, por lo que no se espera una interrupción significativa del suministro a largo plazo, según escribió el distribuidor de combustible Mansfield Energy en un correo electrónico a sus clientes.
El productor de GNL Cheniere Energy dijo que no había impacto en las operaciones y que estaba monitoreando el desarrollo de la tormenta.
La Guardia Costera aplicó la Condición Whiskey, que puede limitar el tráfico de buques, para el Puerto de Brownsville a lo largo de la frontera con México y el Puerto de Corpus Christi en el sur de Texas el miércoles. Whiskey se establece cuando se espera que lleguen vientos huracanados al puerto en un plazo de 72 horas.
Con información de Reuters.