Los precios de la energía en Europa subieron ante la preocupación por la corrosión del parque nuclear francés, las huelgas en todo el país y la ola de frío en el resto de la región.
La electricidad francesa para el año que viene subió hasta un 7,9%, la mayor subida desde finales de enero. También subió la referencia del gas natural neerlandés.
Electricite de France SA debe revisar su programa de controles de reactores nucleares después de encontrar una grieta en su unidad Penly-1 a principios de este año, dijo la autoridad nuclear del país. No está claro cómo afectará la revisión a la producción, que la empresa espera recuperar tras múltiples interrupciones en 2022.
Por otra parte, las huelgas por la reforma de las pensiones han trastornado los mercados energéticos franceses, interrumpiendo las operaciones en puertos, refinerías y centrales eléctricas. También han tenido repercusiones en los países vecinos. La situación, combinada con un temporal invernal en el norte, indica que la crisis energética europea puede prolongarse más de lo previsto esta temporada.
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Según Sebastien Menesplier, Secretario General de la sección de energía del sindicato CGT, el miércoles se desconectaron de la red unos 11 gigavatios (GW) de potencia debido a las huelgas en centrales nucleares, hidroeléctricas y de combustibles fósiles.
Los trabajadores en huelga volvieron a recortar la capacidad hidroeléctrica francesa de EDF.
Las cuatro terminales de GNL de Francia están bloqueadas debido a las huelgas, según informó el sindicato por separado. Las interrupciones en tres de ellas pueden continuar hasta la próxima asamblea general del sindicato, prevista para el 14 de marzo, según el operador Elengy.
Los envíos desde las refinerías de TotalEnergies SE también permanecían paralizados el miércoles por la mañana debido a las huelgas, dijo un representante de la petrolera francesa.
La situación en el Reino Unido
Por otra parte, la energía eólica ha repuntado en el Reino Unido después de que la helada del martes obligara a la red a utilizar por primera vez su reserva de carbón. Ello se debió en parte a la demanda francesa de energía importada, debido a la menor capacidad disponible en ese país.
Se espera que esta semana aumente la demanda de calefacción en algunas zonas de la región. En Gran Bretaña nevará y helará, algo poco habitual a estas alturas de la temporada. En Escandinavia se prevén temperaturas inusualmente bajas hasta la semana que viene, según el pronosticador Maxar Technologies Inc.
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Aunque las reservas europeas de gas se mantienen muy por encima del nivel estacional, los operadores siguen de cerca la evolución del tiempo y los flujos de GNL. Cualquier interrupción prolongada de los envíos podría suscitar preocupación, ya que las existencias pueden agotarse rápidamente, lo que dificultaría su reabastecimiento durante el verano.
De momento, según BloombergNEF, es probable que la competencia con el norte de Asia por el GNL al contado siga siendo baja en los próximos meses. Esto debería traducirse en unos flujos elevados y continuados de este combustible hacia Europa, señaló el investigador en una nota el miércoles.
Los futuros holandeses a un mes, la referencia europea del gas, subían un 1,7% hasta los 44,13 euros el megavatio-hora a las 11.44 horas en Ámsterdam. El equivalente británico también avanzó.
Noticia tomada de: Rigzone / Traducción libre del inglés por World Energy Trade
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