Los drones suelen despegar desde el suelo o incluso desde la mano, siempre y cuando se encuentren en posición estacionaria. Pero no este dron. La nueva creación de un equipo de investigadores junto al laboratorio de propulsión a chorro de la NASA (JPL) puede despegar disparado desde un tubo que parece un cañón.

Su nombre es SQUID, cuyas siglas significan “dron de investigación aerodinámico de despliegue”, y tiene una forma ovalada similar a la de un pequeño torpedo, al menos cuando tiene los rotores plegados y cercanos al cuerpo del dron. Su largo es de apenas unos 27 centímetros y pesa 530 gramos.
Una vez disparado, despliega sus cuatro rotores y entra en vuelo a una velocidad inicial de 55 kilómetros por hora.
Según sus responsables, un trabajo conjunto de un equipo de investigación de la universidad Caltech, Estados Unidos, y el JPL de la NASA, los rotores del SQUID comienzan a funcionar a partir de los 200 milisegundos de haber sido disparado, y el dron estabilizará su vuelo en menos de un segundo. El dron incluso puede ser disparado desde un cañón que se encuentra sobre un vehículo en movimiento, como puedes visualizar en el vídeo.
Por supuesto, el desarrollo de este dron, en el que está involucrado el JPL, tiene que ver con su posible potencial para la exploración de otros planetas. Según los investigadores, aunque el SQUID ha sido diseñado para operar en la Tierra, es posible adaptarlo a otros planeta como Marte o incluso la luna Titán.
Según el JPL, utilizar un sistema balístico para el despegue de drones en otros planetas podría facilitar su despliegue, a diferencia del helicóptero que planean enviar a Marte junto al rover Mars 2020, dado que el rover tendrá que alejarse considerablemente del sitio de aterrizaje del helicóptero antes de que pueda despegar.
Noticia de: Gizmode / Traducción libre del inglés por WorldEnergyTrade.com
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