En medio de la pandemia del Covid-19 se ha dado una compra que ha dejado fuera de lugar a más de uno, al ser la primera que sucede en Europa en esta época, con la cual Iberdrola se introduce en el mercado francés de generación eléctrica renovable con la compra de AAlto Power, por cien millones de euros, la cual fuera propiedad del grupo Aiolos y Caisse des Dépôts.
Esta empresa francesa cuenta con una amplia cartera de proyectos que superan los 630 MW, y dispone de una capacidad ya instalada y operativa de unos 120 megavatios (MW) eólicos. Y de esta manera abre las puertas del mercado francés al primer grupo energético español por capitalización como es Iberdrola y con ello agitar el mercado europeo de servicios energéticos.
A principios de año, Iberdrola logro contar con un 70% del capital y adquirió las participaciones que tenían Renewable Energy Systems (RES) y Caisse des Dépots, por un monto 50 millones de euros, dándole a la compañía total autonomía para dirigir el proyecto cuya inversión total está valorada en 2.500 millones de euros. De esta forma, Iberdrola participa con mayor control en el proyecto de energía marina Saint-Brieuc, ubicado frente a las costas de la Bretaña francesa.
Con esta planta se verán favorecidas a nivel energético 835.000 personas a partir del 2023 cuando se estima se de inicio a la fase operativa, que aportara 496 MW de capacidad total instalada generada a través de sus 62 turbinas eólicas Siemens Gamesa.
El parque eólico marino de la bahía de Saint-Brieuc aportará 496 MW a la red eléctrica de Francia.
Lamentablemente los megavatios en operación aún son inexistentes en Saint-Brieuc, lo que representa un problema para que Iberdrola logre participar activamente en el negocio de los servicios de venta de electricidad a los consumidores en Francia.
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