Los precios del petróleo subieron el miércoles, ya que la Unión Europea, el mayor bloque comercial del mundo, explicó sus planes para eliminar gradualmente las importaciones de petróleo ruso, lo que contrarrestó la preocupación por la demanda de China, el mayor importador de crudo.
Los futuros del crudo Brent subieron 3,92 dólares, o un 3,7%, hasta los 108,89 dólares por barril a las 11:02 a.m. EDT (1502 GMT). Los futuros del crudo West Texas Intermediate subieron 4,02 dólares, o un 3,9%, a 106,32 dólares el barril.
Europa importa diariamente unos 3,5 millones de barriles de petróleo y productos petrolíferos rusos, y también depende de los suministros de gas de Moscú.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, propuso el miércoles un embargo de petróleo por etapas a Rusia por su guerra en Ucrania, además de sancionar al principal banco ruso.
Las medidas de la Comisión incluyen la eliminación progresiva del suministro de crudo ruso en seis meses y de productos refinados para finales de 2022, dijo von der Leyen. También se comprometió a minimizar el impacto en las economías europeas.
Sin embargo, Hungría y Eslovaquia podrán seguir comprando crudo ruso hasta finales de 2023 en virtud de los contratos existentes, según declaró el miércoles a Reuters una fuente de la UE.
“El petróleo ruso es ahora ‘petróleo malo'”, dijo el analista jefe de materias primas de SEB, Bjarne Schieldrop.
“Esta guerra energética del ‘petróleo bueno’ frente al ‘petróleo malo’ acaba de empezar”, añadió.
En Estados Unidos, las existencias de crudo aumentaron modestamente la semana pasada, según la Administración de Información Energética estadounidense. Las existencias aumentaron en 1,2 millones de barriles, ya que Estados Unidos liberó más barriles de las reservas estratégicas.
“Los esfuerzos de la Administración Biden para empujar el crudo hacia el mercado internacional parecen estar funcionando, ya que las continuas y sólidas liberaciones de las reservas estratégicas se traducen en un aumento de las exportaciones de crudo”, dijo Matt Smith, analista principal de petróleo de Kpler.
Las existencias de combustible cayeron, en parte debido a las mayores exportaciones de productos desde la invasión de Rusia, ya que los compradores han buscado otras fuentes.
El martes, los precios del petróleo cayeron más de un 2% debido a las preocupaciones sobre la demanda derivadas de los prolongados cierres COVID-19 de China, que han restringido los planes de viaje durante la temporada de vacaciones del Día del Trabajo.
El índice global de gerentes de compras de manufactura se contrajo en abril por primera vez desde junio de 2020, con los cierres de China como un contribuyente clave, dijo Caroline Bain, economista jefe de productos básicos en Capital Economics en una nota.
El jueves, se espera que la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados mantengan su política de otro aumento mensual de la producción.
Los inversores están a la espera de un anuncio de la Reserva Federal de Estados Unidos este miércoles. Se espera que intensifique sus esfuerzos para reducir la elevada inflación, subiendo los tipos de interés y reduciendo su balance.
¿Qué opina Rusia al respecto?
El Kremlin declaró que Rusia estaba valorando varias respuestas a los planes de la UE, y añadió que las sanciones aumentarían los costes para los ciudadanos europeos.
En el frente bélico, el ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu, renovó la advertencia de que Moscú trataría de golpear los envíos de armas a Ucrania por parte de Estados Unidos y sus aliados de la OTAN.
El Ministerio de Defensa ruso dijo que sus fuerzas desactivaron seis estaciones de ferrocarril utilizadas para suministrar armas occidentales a los soldados ucranianos en el este. También han atacado 40 objetivos militares, incluidos cuatro depósitos de munición y artillería.
El Ministerio de Defensa de Ucrania dijo que los bombarderos estratégicos rusos dispararon 18 cohetes “con el objetivo de dañar la infraestructura de transporte de nuestro país”.
Rusia publicó lo que dijo eran imágenes de vídeo de dos misiles de crucero Kalibr lanzados desde el Mar Negro y dijo que habían alcanzado objetivos terrestres no especificados en Ucrania.
Al anunciar sus simulacros militares por sorpresa, el Ministerio de Defensa de Bielorrusia dijo que no suponían una amenaza para sus vecinos, pero el servicio de fronteras de Ucrania dijo que no podía descartar que las fuerzas bielorrusas se unieran al asalto de Rusia.
“Por lo tanto, estamos preparados”, dijo el portavoz Andriy Demchenko.
Algunas fuerzas rusas entraron en Ucrania a través de Bielorrusia cuando comenzó la invasión el 24 de febrero, pero las tropas bielorrusas no han participado hasta ahora en lo que Moscú llama una “operación militar especial” para desarmar a Ucrania y defender a su población rusoparlante de los fascistas.
Kiev y sus partidarios occidentales dicen que la afirmación de Moscú sobre el fascismo es un pretexto absurdo para una guerra de agresión no provocada que ha llevado a más de cinco millones de ucranianos a huir al extranjero.
El Kremlin rechazó el miércoles las especulaciones de que Putin declararía formalmente la guerra a Ucrania y decretaría una movilización nacional el 9 de mayo, cuando Rusia conmemora la victoria de la Unión Soviética sobre la Alemania nazi en la Segunda Guerra Mundial. Está previsto que Putin pronuncie un discurso y supervise un desfile militar en la Plaza Roja de Moscú.
El convoy que partió de Mariupol, organizado por las Naciones Unidas y el Comité Internacional de la Cruz Roja, se dirigía a la ciudad de Zaporizhzhia, controlada por Ucrania, dijo el gobernador de Donetsk, Pavlo Kyrylenko.
No dijo cuántos autobuses formaban parte del convoy ni si se había evacuado a más civiles de la vasta planta siderúrgica de Azovstal, donde los últimos defensores de la ciudad están resistiendo a las fuerzas rusas que han tomado Mariupol.
Los primeros evacuados de Azovstal llegaron en autobús a Zaporizhzhia el martes, después de haber permanecido durante semanas en búnkeres bajo la extensa fábrica de la era soviética.
Mariupol bajo el dominio de Rusia
El alcalde de Mariupol, Vadym Boichenko, informó de los intensos combates en Azovstal el miércoles y dijo que se había perdido el contacto con los combatientes ucranianos. Más de 30 niños se encuentran entre los civiles que esperan ser evacuados, añadió.
Rusia reclama ahora el control de Mariupol, una ciudad que llegó a tener 400.000 habitantes pero que ha quedado reducida a escombros después de semanas de asedio y bombardeos. Es clave para los esfuerzos de Moscú por aislar a Ucrania del Mar Negro -vital para sus exportaciones de grano y metales- y unir el territorio controlado por Rusia en el sur y el este.
Moscú ha desplegado grupos tácticos de 22 batallones cerca de la ciudad ucraniana oriental de Izium en un posible impulso para capturar las ciudades de Kramatorsk y Severodonetsk en Donbas, dijo la inteligencia británica. La agencia Reuters no pudo verificar el informe.
Las ciudades están en la región oriental de Donbás, el principal objetivo de Rusia junto con la costa sur de Ucrania desde que Moscú no logró tomar Kiev, la capital, en las semanas posteriores a su invasión.
Ucrania se mantiene desafiante a pesar del implacable asalto.
“Rusia lucha por avanzar y sufre terribles pérdidas. De ahí el desesperado terror de los misiles en toda Ucrania. Pero no tenemos miedo y el mundo tampoco debería tenerlo”, dijo en Twitter el ministro de Exteriores ucraniano, Dmytro Kuleba.
“Más sanciones a Rusia. Más armas pesadas para Ucrania. El terrorismo de misiles de Rusia debe ser castigado”.
Noticia tomada de: Reuters / Traducción libre del inglés por / World Energy Trade
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