Muchas veces se tiende a pensar que los parques eólicos más grandes son más eficientes, pero a medida que la energía eólica se convierte en un componente más importante del entorno energético mundial, la construcción de turbinas cada vez más grandes podría resultar bastante caras.
Halo Energy ha desarrollado un pequeño aerogenerador encapsulado que proporciona una producción eficiente de energía a pequeña escala, lo que podría mejorar el rendimiento de la energía eólica en el mundo.
La energía renovable representa una parte cada vez mayor del sector energético mundial, con la energía eólica liderando el camino. La oficina estadística de la UE, Eurostat, informó en 2017 que la energía eólica representaba el 30,7 % del consumo bruto de energía de la UE, más que cualquier otra fuente renovable, y que la capacidad instalada en todo el mundo ha aumentado de 435.284 MW en 2015 a 596.556 MW en 2018, lo que supone un aumento del 28 %.
Gran parte de ese éxito se ha logrado gracias a las grandes turbinas, las que producen más de 100 kW, y que normalmente se instalan en grandes parques de producción. Se tiende a pensar que las turbinas más altas con palas más grandes son más eficientes, produciendo más energía a igual precio, lo que ha animado a los fabricantes a producir turbinas cada vez más grandes; por ejemplo, Lockheed Martin ha diseñado una gigantesca turbina de 50 MW, cuyas palas miden 200 metros de largo.
Sin embargo, la construcción de turbinas cada vez más grandes requiere una mayor inversión, tanto económica como logística, cuyas turbinas sólo pueden ser productivas en zonas ventosas haciendo que cierta cantidad, simplemente sean demasiado grandes para funcionar en algunas partes del mundo.
La energía eólica distribuida ha surgido como una solución a este problema. Definido como un aerogenerador que produce menos de 100 KW, estas pequeñas turbinas eólicas pueden desplegarse en una mayor variedad de sitios, permitiendo a cualquier persona producir su propia energía eólica.
Uno de sus principales defensores es Halo Energy, que ha desarrollado una turbina de 6 KW. Mide apenas 3,65 metros de diámetro, y podría ayudar a resolver el desequilibrio del sector eólico entre las operaciones a escala de servicios públicos y las distribuidas.
La turbina de Halo maximiza su eficiencia a pesar de su tamaño limitado, debido a las cubiertas estáticas construidas alrededor de las tres palas giratorias, que crean un perímetro fijo alrededor del borde del área de barrido del rotor, el espacio donde giran las palas, aumentando efectivamente la velocidad del viento que pasa a través de las palas. El resultado es una turbina con el doble de potencia y con la mitad del tamaño de las convencionales.
Las cubiertas estáticas también ayudan a superar una limitación clave de las turbinas de menor escala, la de las pérdidas de las puntas de las palas. Esto es aire desviado por las palas fuera del área de barrido del rotor y no convertido en electricidad; mientras que esto es menos problemático en las turbinas a gran escala, debido a la mayor cantidad de energía producida, si una turbina distribuida tiene una producción máxima de sólo 6 KW, al igual que la turbina de Halo, estas pérdidas pueden ser significativas.
Noticia de: Ecoinventos
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