El gobierno británico está cerca de aprobar la central nuclear “Sizewell C” de 26.000 millones de dólares, luego de que las conversaciones con el gigante energético francés “Electricité de France (EDF)” se intensificaran en las últimas semanas sobre un proyecto en el que también participa una empresa china.
Los acontecimientos se produjeron antes de un libro blanco del gobierno, que se publicará a finales de este mes, que intentará establecer el curso de la política energética del Reino Unido en las próximas décadas.
Después de que se presentaran los documentos de planificación en mayo, se dice que las conversaciones se intensificaron sobre el proyecto del este de Inglaterra, mientras que aún se están discutiendo los detalles sobre cómo se financiarán los nuevos reactores nucleares, informó la BBC.
Los planes de energía nuclear del Reino Unido recibieron un golpe con el reciente colapso de otros dos proyectos de energía en el Reino Unido, en Anglesey y Cumbria, cuando las empresas japonesas Hitachi y Toshiba se retiraron.
El gobierno dijo que “sigue comprometido con una nueva energía nuclear”, y que EDF ya está construyendo una central eléctrica en Hinkley Point en Somerset, en el oeste de Inglaterra.
La empresa “China General Nuclear Power Group (CGN)”, posee una participación del 33% en el proyecto Hinkley Point C, mientras que EDF posee los otros dos tercios.
CGN también tomó una participación del 20% en la fase de desarrollo de “Sizewell C” en el entendimiento de que participaría en la fase de construcción y luego se le otorgaría el contrato para construir un reactor de su propio diseño en Bradwell, en el sureste de Inglaterra.
Sizewell C proporcionará 900 puestos de trabajo durante su vida útil
Las empresas y los sindicatos han acogido con satisfacción el proyecto propuesto de “Sizewell C” que, según EDF, proporcionaría 900 puestos de trabajo cualificados durante su vida útil. Se espera que el proyecto cree otros miles de puestos de trabajo más a través de cadenas de suministro en el área.
El gobierno del Reino Unido espera que la estación gigante proporcione electricidad con bajas emisiones de carbono para ayudar a satisfacer las necesidades del país.
Los críticos de “Sizewell C” dicen que el futuro está en las energías renovables, junto con el desarrollo de tecnología que optimiza la oferta y la demanda de energía en tiempo real. Las organizaciones benéficas han criticado los planes de hormigón en una gran zona de pantanos raros como “desastrosos”.
El presidente del grupo “Together Against Sizewell C, Pete Wilkinson”, argumentó que “las energías renovables compiten con la nuclear en todos los frentes: costo, desperdicio, empleo, CO2 y tiempo de implementación“.
El editor de negocios de la BBC, Simon Jack, señaló en su análisis que los activistas admiten que lograr los objetivos gubernamentales de cero emisiones netas de carbono para 2050, solo con energías renovables no sería posible sin comprometer la estabilidad de la red eléctrica. Según EDF, se espera que las nuevas plantas de “Hinkley y Sizewell” satisfagan el 14% de las necesidades de electricidad del Reino Unido.
La energía nuclear suministra actualmente más del 20% de toda la electricidad del Reino Unido, pero casi la mitad de la capacidad actual se retirará para 2025, según la Asociación Nuclear Mundial.
EDF afirma que con la creciente demanda esperada de electricidad en los sistemas de transporte y calefacción en el Reino Unido, se requerirán cantidades masivas de electricidad baja en carbono, y las centrales nucleares de nueva generación pueden proporcionar esto.
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