La interrupción de la cadena de suministro mundial y la escasez causada por la pandemia de Covid van a continuar hasta bien entrado el año 2022, según un informe.
Los expertos en cadena de suministro digital project44 afirman que los retrasos medios en el transporte marítimo de China a Europa aumentaron a 6 días en diciembre, después de haber disminuido durante meses.
Los retrasos en las rutas de China a la costa oeste de EE.UU. también han aumentado de forma constante desde octubre. La congestión de los puertos y los retrasos en la producción han perturbado los horarios durante meses.
“Es probable que los retrasos continúen hasta bien entrado el año 2022”, dijo project44, “ya que las rupturas de Covid continúan a lo largo de las cadenas de suministro y los consumidores siguen comprando a un ritmo saludable.”
Gran impacto
El informe señala que el Covid sigue teniendo un enorme impacto en el comercio mundial, ya que los costes de envío se han disparado, los retrasos se han convertido en rutina y los contenedores de envío vacíos en todo el mundo están en el lugar equivocado.
Esto significa que el número de salidas en blanco -cuando los buques portacontenedores cancelan rutas o no llegan a los puertos en su horario normal- ha ido en aumento.
“Las salidas en blanco continuarán hasta bien entrado el año 2022, ya que los puertos están trabajando en la reducción de los retrasos y el gasto de los consumidores sigue siendo fuerte”, dijo Josh Brazil, vicepresidente de información de la cadena de suministro en project44.
Los buques también tienen que esperar más de lo previsto en los puertos para cargar y descargar.
A las 0800 GMT del 25 de enero, por ejemplo, según Lloyd’s List Intelligence, había 82 buques portacontenedores frente a los puertos de Shangai y Ningbo, en China, esperando para subir la carga a bordo. Más al sur, cerca de Yantian y Hong Kong, había otros 61 buques esperando.
Al otro lado del Pacífico, frente a los puertos de Long Beach y Los Ángeles, 68 buques esperaban para descargar su carga. Y en Europa había 19 barcos frente a Rotterdam y Amberes.
Figura 1. Los minoristas advirtieron en el período previo a la Navidad que habría cierta escasez de juguetes.
En algunos momentos del año pasado, estas cifras eran mayores, sobre todo en Estados Unidos, pero la tensión en las cadenas de suministro sigue siendo grave.
Los puertos de todo el mundo han intentado acelerar las cosas. Rotterdam, por ejemplo, manejó un número récord de contenedores en diciembre, y varios puertos han pasado a trabajar 24 horas al día, 7 días a la semana, para tratar de mantener el ritmo de la demanda.
Zero-Covid
Sin embargo, la política china de “cero” Covid no está facilitando las cosas, y las cosas se ralentizarán de todos modos durante el Año Nuevo chino en las próximas semanas. Por tanto, se prevé que los trastornos continúen en un futuro próximo.
“La mayor parte de los retrasos y colas en China se deben a las restricciones terrestres impuestas por las autoridades portuarias en los principales puertos de exportación”, afirma Michelle Wiese Bockmann, editora de mercados de Lloyd’s List.
Y añadió: “La política de cero Covid ha dado lugar a un sistema de listas para los trabajadores portuarios, en el que sólo la mitad trabajan en un momento dado y están confinados en el puerto, mientras que los demás están libres”.
Hay una razón por la que las autoridades portuarias están haciendo esto: si cualquier infección se extendiera por las terminales, provocaría su cierre, causando retrasos aún mayores. Pero una menor capacidad de manipulación implica mayores tiempos de espera para los buques en sus atracaderos.
Los principales beneficiarios de esta sacudida del sistema han sido las compañías navieras, que están obteniendo enormes beneficios de la demanda masiva, en medio de una feroz competencia por el espacio en los buques portacontenedores.
El coste de enviar un contenedor desde Asia a Europa o Estados Unidos se ha disparado, y la consultora marítima Drewry estimó que el sector naviero obtuvo unos beneficios combinados récord de 190.000 millones de dólares en 2021.
Según Drewry, ese récord podría batirse en 2022, y el impacto en cadena es bastante obvio: el aumento del coste del transporte de mercancías por todo el mundo está alimentando el aumento de la inflación para todo el mundo.
Noticia tomada de: BBC / Traducción libre del inglés por World Energy Trade
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