Los precios del crudo que ha llevado a toda la industria a una severa revisión de sus gastos y la incertidumbre política en Guyana parecen que no cambian los planes de las 3 grandes empresas que lideran los prolíficos descubrimientos en Guyana. Sin embargo, los proyectos si sufrirán retrasos en la decisión final de inversión.
Guyana ha sido una sorpresa en términos de descubrimientos petrolíferos, su potencial producción constituyen una oportunidad única para la transformación económica de la nación. Varias gigantes petroleras internacionales están muy interesadas en formar parte de los desarrollos petroleros que allí se llevarán a cabo.
Ahora bien, las condiciones actuales de colapso de la demanda mundial de crudo han llevado a la erosión de los precios del crudo y han obligado a las compañías petroleras a replantearse sus objetivos operacionales, realizando fuertes recortes de gastos de capital para poder mantener a flote las finanzas y cumplir con las exigencias de los inversionistas.
Los niveles de precio y los nuevos objetivos de gasto de capital han hecho que varios proyectos a nivel mundial ya no sean viables económicamente, lo cual llevaría plantear el retraso en su ejecución o simplemente su suspensión.
En el caso de Guyana, las empresas ExxonMobil y Hess han manifestado que mantendrán los proyectos de exploración y producción, sin embargo, algunos tendrán retrasos que puede llevar hasta el 2021 su ejecución.
A pesar del aun poco claro panorama político de la nación luego de las elecciones presidenciales del 2 de marzo pasado, que pudiese afectar el contrato de producción compartida del país con ExxonMobil Corp. y Hess Corp., ambas compañías, como toda empresa petrolera, tienen una visión a largo plazo y en medio de las dificultades políticas y económicas, seguramente harán todo lo necesario para mantenerse en la nación sudamericana.
Muestra del interés de ExxonMobil en la región, es el comunicado de la compañía del 7 de abril, en donde manifiesta que el desarrollo de numerosos descubrimientos de clase mundial en aguas profundas en Guyana sigue siendo una parte integral de los planes de crecimiento a largo plazo de la compañía.
Hasta ahora se han descubierto más de 8 mil millones de barriles de petróleo recuperable en el Bloque Stabroek ubicado costa afuera.
El precio del petróleo por debajo de los costos de equilibrio
Desde el comienzo del año, los precios mundiales del petróleo se han desplomado más del 50% a medida que la pandemia de coronavirus redujo la demanda, el panorama se oscureció más cuando Arabia Saudita y la OPEP aumentaron la oferta mundial de crudo, lo que llevó al crudo Brent a cerrar en la sesión del 9 de abril en US$ 31.48 por barril, inclusive luego de los acuerdos de la OPEP+ para reducir en 10 millones la producción diaria de crudo. Al 13 de abril el precio del Brent cerró a la baja en US$ 31.85 por barril.
En el caso más amplio de América Latina, los proyectos para recuperar hasta 16 mil millones de barriles de reservas de petróleo, con un costo de equilibrio de aproximadamente US$ 40 / barril, pudieran retrasarse o abandonarse en el entorno deprimido del precio del petróleo, así lo expuso la consultora IHS Markit en un informe del 6 de abril. Todos estos proyectos tienen decisiones finales de inversión (FID) que se esperan entre 2020 y 2022.
Según los analistas de Wood Mackenzie, solo aquellas compañías con balances financieros más sólidos, es decir las grandes petroleras, son las que pueden considerar hacer FID en estos proyectos.
De igual modo Wood Mac prevé que para los proyectos globales que ya están en desarrollo, con socios en aprietos financieros y con altos costos tendrán dificultades para continuar. Agregó que proyectos petroleros ventajosos como los de aguas profundas en regiones como Guyana seguirán avanzando.
ExxonMobil
La compañía anunció el 7 de abril sus planes para reducir el gasto de 2020 en US$ 10 mil millones, en virtud de la caída del precio del petróleo, la compañía informó que la producción del proyecto Liza fase 1 del Bloque Stabroek no se verá afectada.
Liza fase 1, que entró en funcionamiento en diciembre de 2019, tiene una capacidad de producción de 120,000 bpd un costo de equilibrio de US$ 37 / barril.
Las operaciones actuales a bordo del buque de producción Liza Destiny no se verán afectadas y el buque de producción Liza Unity actualmente se encuentra en construcción.
El proyecto Liza fase 2 producirá 220,000 bpd, se espera la puesta en marcha de la producción en 2022. Payara con 220,000 bpd y el proyecto gigante offshore Hammerhead tiene el potencial de producir entre 150,000 y 190,000 bpd.
La compañía espera la aprobación del gobierno para proceder con un tercer buque de producción para el desarrollo de Payara, sin embargo se espera un retraso de 6 meses para el FID de Payara y Pacora, así como de 12 a 18 meses para el de Hammerhead.
Esto a pesar de que el precio de equilibrio del petróleo para estos proyectos está entre US$ 30 / barril y US$ 40 / barril, sin embargo, la incertidumbre sobre el corto plazo y los precios del crudo a largo plazo evitarán que ExxonMobil se precipite en la decisión final de inversión de estos proyectos.
ExxonMobil opera el bloque Stabroek con una participación del 45% con una producción proyectada para 2025 de alrededor de 750,000 barriles de petróleo equivalente por día.
Hess Corp.
La empresa norteamericana Hess, socia de ExxonMobil, también mantiene buenas expectativas y continúa con sus planes en Guyana. Hess, tiene una participación del 30% en Stabroek.
Sin embargo, la compañía planea reducir su presupuesto para 2020 en US$ 800 millones, llevándolo a US$ 2.2 mil millones.
Con base en su nuevo plan de gastos de capital, la mayoría de las actividades de perforación discrecional y offshore de Hess, con la excepción de las de Guyana, se suspenderán. Hess había planeado gastar US$ 860 millones en Guyana este año.
Incertidumbre ante la situación política
Las reservas de petróleo y gas recientemente descubiertas de Guyana estarán controladas por el partido político que llegue al poder luego de las elecciones, así como las inversiones extranjeras procedentes del sector energético del país que estarían destinadas a transformar la economía de la nación.
El FMI ha proyectado que la economía de Guyana crecerá un 85 % este año, y The Economist informó que para 2024, la nueva riqueza del país podría aumentar los ingresos por persona de US$ 5000 a US$ 19,000
El gobierno de Guyana se encuentra en una situación difícil, se encuentra aislado internacionalmente luego de los resultados electorales de marzo de 2020, en los cuales según los observadores internacionales, hay indicios de fraude.
Hess, ExxonMobil, así como su otro socio, China National Offshore Oil Corp., que tiene una participación del 25% en Stabroek, tienen un contrato para compartir la producción de petróleo con el gobierno de Guyana.
El contrato incluye una regalía del 2% sobre las ganancias brutas y una división del 50% de las ganancias después de la recuperación de los costos iniciales de inversión.
Según la porción del techo de recuperación de costos del acuerdo, el 75% de la producción se asignará inicialmente a las tres compañías. El 25% restante se dividirá en partes iguales entre ellos y Guyana, con lo cual la nación se queda con una participación del 12.5%.
El candidato del partido opositor ha pedido se revisen las condiciones de los contratos de explotación petrolera del país con el objetivo que Guyana reciba una porción más justa de las regalías.
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