La energía solar en EE.UU. ha crecido un 4.000% en la última década, pero aún representa solo el 3% de la generación de electricidad. El Gobierno de Biden quiere cambiar eso, y el martes dijo que la energía solar podría proporcionar el 40% de la electricidad del país en 2035.
Para alcanzar este objetivo, el Departamento de Energía dijo que la tasa de crecimiento de la energía solar tendrá que triplicarse -o incluso cuadruplicarse- para 2030. Eso significa que los costos tendrán que seguir bajando.
El costo total de un sistema solar depende de variables como el tamaño, si se compra directamente o se alquila y los precios de la energía en un lugar en particular.
El coste nivelado de la energía solar, que permite compararla con otras formas de generación de energía, ha bajado más del 70% en la última década.
Sin embargo, para alcanzar los objetivos planteados por la administración Biden, los costes tendrán que seguir bajando.
El objetivo del Departamento de Energía es que el costo nivelado de la energía para un sistema solar residencial alcance los 5 céntimos por kilovatio hora en 2030, frente a los 50 céntimos de 2010.
Los costos comerciales tienen que bajar de 39 céntimos en 2010 a 4 céntimos en 2030, mientras que la energía solar a escala de servicios públicos tiene que disminuir de 27 céntimos en la última década a 2 céntimos en 2030.
Figura 1. Los objetivos de la administración Biden para costos de energía solar
Las instalaciones solares de EE.UU. alcanzaron un récord en 2020, ya que la caída de los costos y las políticas de apoyo impulsaron la demanda, y se espera que la industria registre otro año récord en 2021.
Sin embargo, la penetración global sigue siendo baja. El Departamento de Energía señaló una serie de medidas que podrían acelerar el desarrollo de la energía solar, como los créditos fiscales para las energías limpias.
Los incentivos fiscales a la inversión y a la producción, que se prorrogaron a corto plazo en diciembre, han sido fundamentales para la adopción de la energía solar.
Los incentivos fiscales para la transmisión y el almacenamiento también podrían acelerar el despliegue de la energía solar. Las líneas de transmisión pueden llevar la energía generada por los emplazamientos eólicos y solares, que pueden estar lejos de los usuarios finales, a las ciudades donde se necesita. El memorando señalaba que los incentivos fiscales de pago directo podrían movilizar miles de millones de dólares de capital privado.
El Departamento de Energía también señaló que hay que dar prioridad a la innovación y a la fabricación avanzada, así como a la inversión en energía solar comunitaria y de bajos ingresos.
“Los estadounidenses con ingresos bajos y moderados son menos propensos a adoptar la energía solar debido a problemas como la falta de acceso a la financiación, lo que perpetúa las desigualdades energéticas y conduce a niveles generales más bajos de despliegue de la energía solar”, dice la nota.
La lucha contra el cambio climático es una prioridad para la administración Biden. En su primer día en el cargo, el presidente Joe Biden reincorporó a Estados Unidos al Acuerdo Climático de París, y se ha comprometido a reducir a la mitad las emisiones de gases de efecto invernadero para 2030. También ha pedido un sector energético libre de carbono para 2035, para lo cual el crecimiento de la energía solar será fundamental.
El paquete de infraestructuras aprobado por el Senado la semana pasada incluye miles de millones de dólares para proyectos de energía limpia, aunque las cantidades se han reducido considerablemente respecto al Plan de Empleo Americano original presentado en marzo.
La administración ha dicho en repetidas ocasiones que el cambio de los combustibles fósiles a la energía limpia impulsará el crecimiento del empleo, y el memorando afirma que la industria podría emplear hasta 1,5 millones de personas para 2035.
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