A medida que las compañías de petróleo y gas más grandes del mundo enfrentan una presión creciente para abordar el tema del calentamiento global, una nueva investigación del bufete de abogados global CMS revela que las empresas responsables de la mitad de la producción mundial están adaptando su estrategia para invertir en un mercado más diverso.
El bufete CMS trabajó con Capital Economics para examinar las estrategias de transición energética de 15 de las compañías de petróleo y gas más grandes del mundo para evaluar hasta qué punto están comprometidas con las nuevas energías alternativas. Las empresas de la muestra invirtieron US$ 6.6 mil millones en energías renovables, captura y almacenamiento de carbono en 2018.
El informe de CMS revela que las 15 principales empresas de petróleo y gas del mundo están invirtiendo actualmente el 3% de los presupuestos de gasto de capital en energías renovables.
Utilizando escenarios de la Agencia Internacional de Energía, CMS presenta dos proyecciones para la demanda energética futura. Identifica que las grandes empresas de petróleo y gas pudiesen invertir US$ 209 mil millones para 2030, un aumento del 3% al 10% de los presupuestos de gasto de capital, esto si aumentan las políticas y los compromisos con la transición energética.
• Escenario 1: si las políticas existentes continúan, la muestra pudiese aumentar su inversión anual en energías renovables y captura de carbono de los actuales US$ 7 mil millones a US$ 10 mil millones para 2030, totalizando US$ 100 mil millones durante el período.
• Escenario 2: en una rápida transformación energética, las grandes empresas podrían invertir US$ 209 mil millones entre 2019 y 2030. La cifra de inversión anual podría aumentar a US$ 31 mil millones para 2030, lo que equivale al 10% de su gasto de capital anual combinado total. La participación de las “Mayores” en todas las inversiones en energías renovables aumentaría del 2.3% actual al 5.9% para 2030.
Munir Hassan, Jefe del Grupo de Energía de CMS, dijo que las grandes empresas de petróleo y gas entienden que necesitan transformar sus modelos de negocio como parte de un cambio global hacia un futuro más sostenible. Los escenarios energéticos futuros considerados suponen un cambio significativo en el enfoque durante la próxima década.
Motivadores y medios habituales para una energía más limpia
La velocidad de la transición depende de varios factores, incluidos la disminución de los costos de las energías renovables, la presión de los inversores y los clientes, y la nueva regulación gubernamental, junto con una nueva estrategia de asignación de riesgos, dada la reciente volatilidad de los precios del petróleo.
La energía eólica y solar representan el 96% de toda la inversión actual en energías renovables de las empresas incluidas en la muestra. De la muestra, solo ConocoPhillips no ha podido invertir. Por su parte, la energía hidroeléctrica ha atraído la inversión de solo dos empresas, Repsol y Lukoil y la geotérmica lo ha hecho con cuatro Shell, Chevron, Pemex y CNPC. La captura de carbono también es un destino popular para la inversión, con 13 de 15 de nuestra muestra invertidos en la tecnología.
Los mejores y peores participantes del mundo
Las grandes empresas europeas, especialmente BP, Equinor, Repsol y Shell, lideran el progreso en el sector de la energía limpia, dejando atrás a sus contrapartes estadounidenses, Chevron, ExxonMobil y ConocoPhillips y a compañías petroleras nacionales como Pemex, Lukoil y CNPC, que están limitadas por estrictas políticas gubernamentales y marcos regulatorios.
Entre las compañías nacionales, SaudiAramco lidera el camino con su asociación de US$ 200 mil millones con Softbank en energía solar. En términos más generales, Arabia Saudita triplicó recientemente su objetivo de energía renovable y el Gobierno de los Emiratos Árabes Unidos lanzó su “Plan de Energía 2050”, con el objetivo de reducir las emisiones de dióxido de carbono en un 70% y mejorar la eficiencia energética en un 40%.
En Asia oriental, Corea del Sur se ha fijado el ambicioso objetivo de elevar la cartera renovable de su combinación energética al 35% para 2040, desde el 10% en la actualidad.
Barreras para invertir en la transición energética
A pesar del creciente apetito por las energías renovables, el informe identifica una serie de desafíos que podrían evitar el Escenario 2 (una rápida transformación de la energía) y restringir la inversión futura:
• Cambios en los entornos regulatorios: la nueva legislación, la introducción o eliminación de subsidios y los nuevos objetivos para la energía limpia y las emisiones varían drásticamente de un país a otro. Las economías en desarrollo como Indonesia incluso se han retractado de la regulación debido a la falta de pensamiento y apoyo en torno a la implementación, creando un ambiente incierto para los inversores en energías renovables.
• Rendimientos más bajos o menos seguros en el sector energético: sigue existiendo la presión de los accionistas para obtener altos rendimientos proporcionales a los riesgos en el sector, pero esto entra en conflicto con las incertidumbres actuales sobre el futuro de los combustibles fósiles y las intensas presiones de costos y retornos en las partes más maduros del sector de energías renovables.
• Tecnologías cambiantes: todavía existe una considerable incertidumbre en torno a la longevidad de ciertas tecnologías. Hace una década, BP invirtió mucho en energía eólica y solar solo para cancelar esas inversiones, cerrar su sede de energía alternativa en Londres y explorar otras fuentes como las actividades de turbinas eólicas en los Estados Unidos.
• Competencia de las empresas de energía renovable: las grandes empresas de servicios públicos (los principales operadores de energía eólica offshore en el Mar del Norte) y los nuevos participantes están ganando cada vez más fuerza en el mercado.
Norman Wisely, socio de petróleo y gas de CMS, dijo que una de las mayores fortalezas de la industria del petróleo y el gas ha sido su capacidad de pensar y planificar a largo plazo. Con la vida útil promedio de un campo petrolero de 30 a 40 años, las empresas ya están planeando para las próximas décadas.
Este enfoque estratégico para pensar en los desafíos y oportunidades futuros es lo que hace que la transición energética sea emocionante para los principales actores del sector del petróleo y el gas. Los detalles del día a día pueden requerir cambios dinámicos, pero estamos seguros de que las decisiones tomadas hoy son realizadas con estos objetivos a largo plazo en mente.
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