Estados Unidos se convirtió en el primer exportador mundial de gas natural licuado por primera vez en su historia, al tiempo que aumentaban las entregas a una Europa necesitada de energía.
Las exportaciones de GNL de Estados Unidos superaron los 7,7 millones de toneladas en diciembre, según los datos de seguimiento de buques de ICIS LNG Edge, superando por poco a los productores rivales Qatar y Australia por primera vez.
Estados Unidos solo envió su primer cargamento de GNL en 2016 y ha venido en aumentado hasta convertirse en el principal exportador del mundo en solo seis años, ya que la revolución del shale gas impulsó la producción nacional y convirtió al país en una fuerza poderosa en los mercados energéticos mundiales.
Estados Unidos será el mayor exportador del mundo hasta 2022 en su conjunto, según las previsiones del ICIS y la U.S. Energy Information Administration.
Se espera que la demanda siga siendo elevada en Europa, donde se teme por el suministro de gas natural procedente de Rusia a medida que aumentan las tensiones por la concentración militar en su frontera con Ucrania.
La producción de las instalaciones estadounidenses superó a la de Qatar en diciembre tras un aumento de las exportaciones de las instalaciones de Sabine Pass y Freeport, según los datos de seguimiento de buques recopilados por Bloomberg. Cheniere Energy Inc. dijo el mes pasado que una nueva unidad de producción en su planta de Sabine Pass en Luisiana produjo su primer cargamento.
Los precios del gas en Europa alcanzaron nuevos récords a finales de diciembre, a medida que disminuía la confianza en los suministros rusos y se desataba la polémica en torno al gasoducto Nord Stream 2, que podría llevar el gas de Rusia directamente a Alemania. La Unión Europea obtiene alrededor del 40% de su gas natural importado de Rusia, en gran parte a través de Ucrania.
Los precios al por mayor volvieron a subir el miércoles al invertirse el flujo de gas en un gasoducto de Rusia a Europa por decimosexto día consecutivo, informó Reuters.
La Unión Europea lleva años intentando reducir su dependencia del gas natural ruso. Pero varios países de la UE, sobre todo los más cercanos a Rusia, siguen dependiendo casi por completo de Moscú para obtener su gas.
China lleva meses lidiando con una escasez de energía, causada en parte por su intento, a principios del año pasado, de reducir la proporción de electricidad generada por las centrales de carbón.
El número uno
Los productores estadounidenses han respondido ante la crisis aumentando los envíos de GNL a Europa, donde los precios son ahora más altos que en el este de Asia. Los precios en ambas regiones superan con creces los de Estados Unidos, lo que sugiere que las exportaciones estadounidenses de GNL seguirán aumentando en 2022.
La revolución del shale gas, unida a las inversiones de miles de millones de dólares en instalaciones de licuefacción, ha transformado a Estados Unidos de importador neto de GNL a primer exportador en menos de una década.
La producción de gas ha aumentado aproximadamente un 70% desde 2010 y se espera que el país tenga la mayor capacidad de exportación del mundo a finales de 2022, una vez que entre en funcionamiento la terminal de Calcasieu Pass de Venture Global LNG.
La capacidad de exportación de Estados Unidos debería seguir creciendo en los próximos años, según la EIA, que estima que la capacidad máxima era de 11.600 millones de pies cúbicos al día en noviembre de 2021. Esa cifra debería aumentar a 13.900 millones de pies cúbicos diarios a finales de 2022, a medida que se vayan completando las nuevas instalaciones de exportación.
Pero la posición de Estados Unidos como principal exportador de GNL puede ser efímera. Las exportaciones se situaron un poco por encima de las de Qatar y Australia, y cualquier problema de producción podría afectar a la clasificación.
Los productores rivales también están construyendo nuevas infraestructuras, y Qatar planea aumentar su capacidad de GNL a 139 millones de toneladas al año
A más largo plazo, Qatar está planeando un gigantesco proyecto de exportación que entrará en funcionamiento a finales de la década de 2020, lo que podría consolidar al país de Oriente Medio como principal proveedor de este combustible.
“Qatar y Estados Unidos competirán por ser los mayores productores de GNL del mundo en la próxima década”, afirmó Muqsit Ashraf, director general de la división de energía global de Accenture.
Mientras tanto, el aumento de las exportaciones de GNL de Estados Unidos contribuirá a aliviar la escasez de suministro mundial. Europa se enfrenta a una crisis energética invernal, ya que las empresas de servicios públicos se enfrentan a unas existencias de gas natural estacionalmente bajas. Los compradores extranjeros adquirieron el 13% de la producción de gas natural estadounidense en diciembre, lo que supone un aumento de siete veces respecto a cinco años antes, cuando aún no existía la mayor parte de la infraestructura necesaria para enviar el combustible fuera del país.
Las terminales de exportación de GNL de EE.UU. enviaron un récord de 1.043 cargas en 2021, con los países asiáticos atribuyéndose casi la mitad de los destinos y Europa con un tercio, según muestran los datos de seguimiento de buques recopilados por Bloomberg.
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