La AIE (International Energy Agency, IEA, por sus siglas en inglés) espera que la producción mundial de biocombustibles vuelva a los niveles récord observados en 2019 este año, después de caer por primera vez en veinte años en 2020, debido a las restricciones de viaje relacionadas con Covid-19.
La AIE dijo que la producción mundial de biocombustibles este año está programada para volver a los niveles registrados en 2019, en 162.800 millones de litros (143 millones de toneladas), pero advirtió que la recuperación será desigual.
Se pronostica que la producción de etanol se mantendrá un 3.6% por debajo de los volúmenes de 2019, en gran parte debido a un repunte más lento en los EE.UU. y Brasil, dijo la AIE. Estima que la producción en los dos países para 2021 será menor en un 8% y un 5% desde 2019, respectivamente, y se espera que la producción de etanol en Brasil regrese a los niveles de 2019 para 2022.
Estas disminuciones se compensarán parcialmente con las ganancias en India, que ya anunció un objetivo de mezcla de etanol de 7 por ciento en 2021, un aumento de 2.5 puntos porcentuales desde 2019, según la AIE.
Los efectos en curso de la crisis de Covid-19, así como los mayores costos de materias primas y biocombustibles, han retrasado el despliegue de políticas para impulsar la producción de biocombustibles en varios países, incluidos Indonesia, Malasia, Tailandia y Brasil, dijo la AIE.
La AIE espera que la producción de biodiésel, incluido el HVO (Hydrotreated Vegetable Oil, HVO, por sus siglas en inglés), sea un 10% más alta en 2021 que en 2019 gracias a importantes expansiones de capacidad.
Se espera que la capacidad de HVO crezca en un 50% en 2021 a partir de 2020 si los nuevos proyectos se construyen según lo programado, dijo la AIE.
El organismo de control espera que la capacidad de HVO casi se duplique en los próximos dos años, ampliando significativamente la capacidad de producir biocombustibles a partir de desechos y materias primas residuales, y el producto representará el 11% de la producción mundial de biocombustibles pronosticada en 2022, a plena capacidad de producción.
Las políticas estadounidenses están detrás del 85% de las adiciones de capacidad de HVO a nivel mundial, ya que el estándar de combustible renovable, el estándar de combustible bajo en carbono de California y un crédito de mezclador de biodiesel hacen que los proyectos de HVO sean económicamente atractivos, dijo la AIE. Fuera de EE. UU., los nuevos proyectos aumentarán la capacidad en un 12% en 2022 en Europa y en un 32% en la región de Asia y el Pacífico, en comparación con 2020.
La agencia también espera que la producción de biocombustibles aumente en un 7 por ciento en el año en 2022, ya que la producción de HVO aumenta a nivel mundial y la producción de etanol aumenta en la India.
La AIE dijo anteriormente que espera que la producción mundial de biocombustibles aumente en más del 25 por ciento para 2026, en comparación con 2019.
En cuanto a la demanda, la AIE estimó que el consumo total de biocombustibles en 2020 se redujo en un 8 % respecto al año anterior, hasta los 150.000 millones de litros (132 millones de toneladas), debido al impacto de la pandemia del virus Covid-19, pero fue mayor en comparación con las previsiones anteriores de 144.000 millones de litros (127 millones de toneladas) para el año.
“Las mayores caídas interanuales en la producción se produjeron en la producción de etanol de Brasil y Estados Unidos, y en la producción de biodiesel en Europa”, dijo la AIE. La menor producción en estos mercados representó el 90% de la disminución de la producción mundial de biocombustibles en 2020, dijo.
Noticia tomada de: Argus Media / Traducción libre del inglés por World Energy Trade
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