La consultora internacional de energía Xodus Group ha publicado un nuevo análisis que muestra que se requerirá un rápido giro hacia el gas para hacer frente a la creciente demanda mundial de energía.
A diferencia de algunos recientes escenarios energéticos que se han publicado, Xodus Group considera que el consumo mundial de energía seguirá aumentando, impulsado por el crecimiento económico en los países en desarrollo, y que aproximadamente la mitad de esa demanda deberá ser satisfecha por el gas natural.
Se requerirá un giro significativo y rápido hacia el uso del gas natural. Además de un gran crecimiento en energía eólica y solar.
El informe “Pivote rápido al gas” del equipo asesor de Xodus demuestra que la demanda mundial de energía continuará aumentando, impulsada por crecimiento económico en países no miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OECD), y que gran parte de esa mayor demanda será satisfecha por el gas natural.
Bajo este escenario, aproximadamente US$ 20 billones tendrían que gastarse en exploración de gas natural y producción en las próximas dos décadas. Este escenario requerirá avances significativos en tecnología para usar el gas de manera responsable, incluida la Captura, uso y el almacenamiento de Dióxido de carbono (CCUS).
El escenario incluye la eliminación gradual del carbón y el petróleo en respuesta a la electrificación del vehículo y las presiones ambientales y un aumento rápido y robusto de la producción renovable.
Incluso con la eliminación gradual del carbón y el petróleo, y un rápido aumento de las energías renovables, las emisiones de dióxido de carbono continuarían aumentando hasta 2025 antes de comenzar a disminuir.
Crecimiento poblacional y calidad de vida
Existen dos impulsores principales para mayor demanda de energía: El crecimiento poblacional y las mejoras en las condiciones de vida, principalmente en los países en vías de desarrollo.
La última estimación de la población humana de las Naciones Unidas (ONU) es de 7,700 millones en 2019, frente a los 6,100 millones en 2000. La ONU espera un mayor crecimiento a 9,200 millones para 2040. La mayoría de las personas adicionales estarán en África y Asia, mientras que Europa está proyecta ver caer a su población.
El informe muestra que en los últimos 25 años, el consumo de energía per cápita de los países en desarrollo pertenecientes a la OECD ha crecido a poco más del 2% anual. En la OECD, en promedio, el consumo per cápita ha disminuido aproximadamente un 0.2% anual en el mismo período. Estas tasas de crecimiento se utilizaron para proyectar la demanda energética futura por región.
La ONU proyecta que la población de países de la OECD crecerá de 1,300 millones de personas en 2018 a alrededor de 1,400 millones de personas en 2040, mientras que la población no perteneciente a la OECD aumentará de 6,300 millones en 2018 a 7,800 millones en 2040.
Según estos números, el consumo general de energía primaria aumentará de 14,300 Millones de toneladas equivalentes de petróleo por año (Mtep / año) en 2018 a 21,500 Mtep / año en 2040, lo que presenta un escenario desafiante de oferta y demanda.
A medida que los países no miembros de la OECD se vuelvan más ricos, gracias al mayor acceso a la energía, su consumo aumentará de 8,200 Mtep / año a 15,800 Mtep, mientras que los miembros de la OECD solo aumenta marginalmente de 5,600 Mtep / año a 5,700 Mtep. Los efectos del mayor número de personas en los países no-OECD compensan fácilmente los esfuerzos realizados en los miembros de la OECD para ser más eficientes.
Figura 1. Consumo de energía primaria per cápita en países de la OECD y no-OECD
La energía primaria es toda forma de energía disponible en la naturaleza antes de ser convertida o transformada. Consiste en la energía contenida en los combustibles crudos, la energía solar, la eólica, la geotérmica y otras formas de energía.
La matriz energética mundial
El punto de partida para las proyección de cómo podría ocurrir un giro rápido hacia el gas comienza con una disminución, por razones ambientales, en el consumo de carbón y una reducción sin precedentes en el consumo de petróleo (hidrocarburos líquidos) a medida que el transporte y otros usuarios importantes se convierten rápidamente en electricidad producida a partir de fuentes primarias alternativas de energía.
Xodus predice que el petróleo crudo y el carbón disminuirán a 1,500 Mtep por año y 1,200 Mtep por año respectivamente para 2040. Se prevé que el petróleo no convencional y otros líquidos aumenten durante todo el período, al igual que la energía nuclear, suponiendo que no haya cambios importantes en las políticas.
Se han asumido tasas de crecimiento agresivas para las energías renovables, particularmente la energía eólica y solar a más del 1000% cada una para 2040. Además de la capacidad sostenida de instalación, se prevé que el tiempo de actividad y la eficiencia de la nueva capacidad sigan mejorando durante los próximos 20 años.
La participación general del gas natural aumenta al 50%, mientras que el carbón cae al 6% y el petróleo al 13%. Combustibles fósiles combinados caen a 69%, por debajo del 81% en 2017. Solar y eólica aumentan a 4% y 5% del suministro total de energía primaria, por encima del 0,5% y 0,7% respectivamente en 2017.
Figura 2. Consumo de energía primaria en los países OECD y no-OECD
Las energías renovables, incluidas la eólica y la solar en particular, aportan una porción considerable de nuevas fuentes de energía. Los niveles de crecimiento asumidos por Xodus para estas fuentes de energía también serán un desafío.
Su uso está orientado a la generación de energía, y aunque se anticipa una electrificación sustancial, diferentes industrias requieren otros medios para suministrar energía. Además, la naturaleza del viento y la energía solar significa que son una fuente de energía intermitente.
Figura 3. Suministro de energía primario por tipo de fuente
Andrew Sewell, Director de Subsurface de Xodus Group, considera que suponiendo que el gas natural suministre la diferencia en la demanda total, se estima que el consumo podría crecer hasta un 200% para 2040, lo que representa la mitad de todo el consumo de energía primaria y el 73% del componente de combustible fósil.
Las industrias energéticas deben considerar este aumento potencial de la demanda de gas en el panorama de la descarbonización necesaria de nuestro suministro global de energía junto con el enorme gasto de exploración y producción que requeriría.
Algunas conclusiones
La demanda de energía aumentará significativamente en los próximos 20 años, impulsada por el crecimiento de la energía primaria per cápita y la población en países no pertenecientes a la OECD.
Para hacer crecer sus economías y generar riqueza, estos países deberán intensificar su desarrollo hacia la prosperidad energética que el mundo occidental comenzó hace más de 200 años. Las energías renovables ayudarán a reducir la intensidad de los combustibles fósiles durante este crecimiento, pero la mayoría deberá provenir de los combustibles fósiles.
El gas natural puede proporcionar un soporte ideal para la electrificación por poseer alta densidad de energía, amplia disponibilidad, asequibilidad y ser más limpio que el petróleo o el carbón. Por lo tanto, el gas debería ser la fuente de energía probable para satisfacer este aumento de la demanda.
Las emisiones de dióxido de carbono producidas por la quema de este gas natural aumentarán y para acercarse incluso a algunos de los objetivos del Acuerdo de París, estas emisiones deberán almacenarse a través de tecnologías como la de CCUS.
Xodus asesora en transacciones comerciales que superan los US$ 10 mil millones cada año. Sus asesores participan en auditorías de reservas, proyecciones de ingresos, requisitos de capital, integridad de activos y pasivos por desmantelamiento y trabajan regularmente con bancos, empresas de capital privado y operadores de petróleo y gas.
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