Cuando a nivel mundial se habla de dejar de lado el mercado del carbón y especialmente su uso, Hunosa anuncia una generosa inversión para comprarlo por el orden de los 23 millones de euros, con lo cual garantizaría el suministro hasta el 2021 del mineral a la central de La Pereda y así mantenerla operativa.
Esta central térmica con una potencia de 50 megavatios, ubicada en Asturias, produce desde 1995 electricidad quemando carbones de muy baja calidad, residuos de escombreras y restos de madera, tratando con ello de minimizar las emisiones contaminantes, gracias al uso de una tecnología basada en lecho fluido circulante para producir la energía que logran vender a la red general. Lo que significa que en la caldera el combustible se encuentra en suspensión gracias a la inyección y recirculación de aire por medio de ventiladores, algo que garantiza una mezcla adecuada.
Hulleras del Norte S.A. o mejor conocida como Hunosa es una empresa pública que se dedica desde 1967 a la extracción minera y a su explotación en la zona central del Principado de Asturias en España, pero que también hace vida en Latinoamérica, cuenta únicamente con el pozo Nicolasa en Mieres para extraer el carbón.
La hullera pública solicita la disponibilidad de poder contar con 111.000 toneladas anuales de carbón, mientras que el precio establecido en el contrato se ubica en 15 millones por dos años. Según se reseña en el portal Energy News, Rubén García responsable de CC OO en Hunosa considera que “la función de esta compra es complementar la producción propia para mantener la actividad en ambas instalaciones dentro del plan marco hasta 2021”.
A pesar del esfuerzo la capacidad es insuficiente para cubrir las necesidades del lavadero Batán y de la central térmica de La Pereda por lo que será necesario la compra a terceros, especialmente de minas ubicadas en países en vías de desarrollo, donde se garantice minimizar los impactos al medio ambiente y respetar a los trabajadores. Esta medida fue tomada ante el cierre de las explotaciones de Santiago en Aller y de Carrio en Laviana.
Y una vez que logren cubrir la demanda hasta el 2021, la empresa espera poder implementar planes para la transformación de La Pereda lo que le permitirá continuar generando energía pero a través de otras fuentes como la geotermia con el suministro de calor gracias al agua de la mina; la eólica o incluso la hidráulica a través de la inundación de los pozos.
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