Algunas de las principales empresas de refinación estadounidenses afirman que millones de barriles de capacidad de refinación de petróleo podrían cerrarse permanentemente a través del complejo energético mundial después de que está se redujese durante la drástica caída a causa de la pandemia de coronavirus.
Los ejecutivos de la multinacional de energía Phillips 66 y PBF Energy, dijeron a los inversionistas que parte de la capacidad de refinación que actualmente está fuera de línea podría permanecer así dependiendo del curso futuro de la pandemia, mientras que es probable que las nuevas adiciones de capacidad se retrasen.
Incluso bajo un escenario favorable, los proyectos de adición de capacidad tienden a retrasarse, ahora en el entorno en el que estamos hoy es probable que se retrasen aún más significativamente, dijo Jeffrey Dietert, vicepresidente de relaciones con inversores de Phillips 66.
La demanda de combustible para aviones continúa deprimida, lo cual también podría limitar las tasas de utilización de las refinerías en toda la industria, según los ejecutivos de PBF Energy, que por capacidad, es la cuarta mayor refinería de petróleo de Estados Unidos.
La demanda de gasolina y destilados se ha recuperado entre 80% y 90% luego de haberse superado la peor parte de la pandemia, pero la demanda de combustible para aviones sólo ha repuntado un 30%, según la Administración de Información de la Energía de EE.UU. (Energy Information Administration – EIA).
Debido a que las refinerías no pueden fabricar productos tales como el diésel sin producir también combustible para aviones, esto llevará a restringir la producción, así afirmó el CEO de PBF, Thomas Nimbley.
El directivo de PFB Energy no está convencido de que poder alcanzar la plena utilización en esta industria si la demanda de jet fuel permanece deprimida, tal como está hoy.
Otros refinadores independientes de Estados Unidos están funcionando cerca del 80% de capacidad de utilización.
Phillips 66 dijo que su utilización de las refinerías en julio ha estado en el rango bajo del 80% en comparación con una tasa de utilización promedio del 75% durante el segundo trimestre.
Por su parte, PBF Energy operó sus seis refinerías a un promedio del 70% de la capacidad durante el segundo trimestre, Nimbley informó que continuarán funcionando a tasas más bajas hasta que la demanda sostenida de productos justifique una mayor producción.
Las mejoras de la demanda para el otoño se verán afectadas en la medida en que el resurgimiento del Covid-19 afecte los viajes de las personas al trabajo y el regreso de los niños a los colegios, dijeron los ejecutivos de Phillips 66. Las estimaciones de estos ejecutivos son que conducir hacia y desde la escuela representa el 5% de la demanda de gasolina.
Por otro lado, para el CEO de PBF Energy, la pandemia dará lugar a una reducción permanente de la capacidad de refinación de los Estados Unidos.
PBF Energy tuvo márgenes de refinación negativos en abril, lo que impactó severamente las ganancias en la costa oeste de EE.UU, así informó Nimbley en la presentación de resultados.
También informó que la demanda de gasolina repuntó en las últimas semanas en California, y los diferenciales fueron de aproximadamente US$ 13 en San Francisco y Los Ángeles.
PBF reportó una pérdida ajustada por acción de aproximadamente US$ 3.19.
Te puede interesar:
- Las inversiones upstream caen 29% en 2020, alcanzando mínimo de 15 años
- CNOOC inicia la producción de campos petroleros offshore en China
- Arabia Saudita tiene la capacidad de liderar el mercado petrolero mundial: JP Morgan