Una de las baterías de iones de litio más grandes del mundo está planeada para Victoria después de que la compañía de energía renovable Neoen ganara un contrato para construirla cerca de la ciudad regional de Geelong.
Si se construye según lo prometido, la batería tendrá una capacidad de energía de 300 megavatios y una capacidad de almacenamiento de 450 megavatios-hora, por lo que será más del doble del tamaño de la batería en Hornsdale, Australia del Sur, que era la más grande del mundo cuando comenzó a operar en 2017.
Al igual que la instalación de Hornsdale, la batería Geelong se construirá con equipos Tesla. La ministra de energía y cambio climático de Victoria, Lily D’Ambrosio, dijo que se instalaría cerca de la estación terminal de Moorabool y estaría lista para el verano 2021-22.
Se espera que almacene suficiente energía para hacer funcionar alrededor de 500.000 hogares durante media hora.
Se ha reducido desde que se marcó por primera vez en abril, cuando se esperaba que tuviera 600MW y costara 300 millones de dólares. Si bien se encuentra entre las baterías más grandes del mundo, es más pequeña que las baterías planeadas en California y Nueva York.
D’Ambrosio dijo que mejoraría la confiabilidad de la red eléctrica a medida que las antiguas centrales eléctricas de carbón se volvieran menos confiables y el estado aumentara su dependencia de la energía eólica y solar. El gobierno de Andrews tiene como objetivo obtener el 40% de la electricidad del estado a partir de energía renovable para 2025 y el 50% para 2030.
“Al asegurar una de las baterías más grandes del mundo, Victoria está dando un paso decisivo alejándose de la energía de carbón y adoptando nuevas tecnologías que desbloquearán más energía renovable que nunca”, dijo.
Ella dijo que los consumidores pagarían por el uso de la batería a través de sus facturas de energía, pero sugirió que conduciría a una reducción en los precios de la energía al por mayor para que a los victorianos se les cobre menos por la electricidad.
Un análisis independiente encontró que los victorianos recibirían $ 2 en beneficios por cada $ 1 invertido en la batería, dijo. La consultora de energía Aurecon descubrió que Hornsdale Power Reserve ahorró a los consumidores $ 116 millones en 2019.
Neoen ganó el derecho a construir la batería victoriana a través de una licitación realizada por el Operador del Mercado de Energía de Australia. Su contrato, que se extiende hasta 2032, requiere que la batería llene la brecha si hay una interrupción inesperada de la red. También proporcionará los servicios de red necesarios para respaldar la energía renovable variable, como el control de frecuencia rápida. El proceso de licitación fue iniciado por el gobierno de Victoria.
The Victorian Greens dieron la bienvenida al anuncio, diciendo que era parte de lo que había propuesto bajo su plan de “Green New Deal”. Pero la líder en funciones, Ellen Sandell, dijo que la batería debería haber sido de propiedad pública y que el estado debía planear alejarse del carbón.
“Ahora el gobierno debe dar un paso más y admitir que debemos dejar el carbón en Victoria”, dijo Sandell.
El grupo de conservación Environment Victoria dijo que fue un “cambio de juego para la transición de Victoria de las antiguas centrales eléctricas de carbón a la energía limpia”.
“Esta gran batería nos lleva a la mitad del objetivo de almacenamiento que necesitamos para prepararnos para el cierre de la central eléctrica [de carbón] de Yallourn”, dijo el director ejecutivo del grupo, Jonathan La Nauze.
La oposición estatal dijo que estaba “comprometida a apoyar una transición de energía limpia considerada”, pero argumentó que el gobierno no había defendido que el proyecto estuviera en Geelong. El portavoz de energía de la Coalición, Ryan Smith, dijo que había pedido en junio que se instalara una batería más al oeste, en Mortlake, cerca de la principal zona de producción de energía renovable del estado.
“Si está ubicado en el sitio propuesto por Labor, se perderá demasiada energía de los proyectos de energías renovables en la transmisión al almacenamiento de la batería”, dijo Smith.
Se espera que haya 80 trabajos durante la construcción de la batería, pero solo seis puestos permanentes de tiempo completo una vez que esté construida.
La introducción de otra batería grande en la red reducirá aún más la medida en que depende de la energía alimentada por gas para la generación “despachable” a la que se puede recurrir para respaldar la energía renovable variable.
Aemo ha estimado que es probable que la red nacional necesite entre seis y 19 gigavatios de energía distribuible para 2040, ya que el sistema está cada vez más dominado por la energía solar y eólica. Encontró que la energía renovable a veces puede proporcionar casi el 90% de la electricidad para 2035, la cantidad de energía a gas disminuiría a medida que la energía hidroeléctrica y las baterías se pusieran en funcionamiento y no había lugar para una nueva generación de carbón.
A pesar de esto, el gobierno de Morrison dice que la nueva energía a gas es esencial para la estabilidad de la red a medida que cierran las antiguas plantas de carbón.
La directora ejecutiva del operador del mercado, Audrey Zibelman, dijo que la propuesta de Neoen era “una respuesta de mercado significativamente más competitiva en costos y atractiva que otros desarrollos importantes de baterías recientes en Australia”.
Una parte de la capacidad de la batería se reservará para aumentar el suministro de electricidad a través de un cable de interconexión entre Victoria y Nueva Gales del Sur.
Noticia tomada de: The Guardian / Traducción libre del inglés por World Energy Trade
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