Se espera que los precios del cobre aumenten, a medida que se acelera la transición a la energía verde y se ajusta la oferta del metal, dice Goldman Sachs.
Sobre la base de un aumento esperado en la demanda, junto con un mercado ya ajustado a raíz de la pandemia, el banco de inversión elevó sus pronósticos sobre el cobre y ahora ve que los precios promediarán US$ 11.000 por tonelada métrica durante los próximos 12 meses.
Para 2025, el metal podría tener un precio de US$ 15.000 la tonelada, un aumento del 66%, dijo Goldman en un informe titulado “El cobre es el nuevo petróleo”.
El cobre será crucial para lograr la descarbonización y reemplazar el petróleo con fuentes de energía renovables, y en este momento, el mercado se enfrenta a una crisis de suministro que podría impulsar el precio en más de un 60% en cuatro años.
“El cobre es el nuevo petróleo”, dijo Goldman, y agregó que no hay descarbonización sin cobre.
Escalada de precios luego de ser definido como “el nuevo petróleo”
El cobre para entrega en mayo subió un 2,51% en las operaciones de la tarde del 15 de abril, con futuros a US$ 4,22 la libra (US$ 9.285 dólares la tonelada) en el mercado Comex de Nueva York.
El 14 de abril, el precio de referencia de los futuros del cobre a tres meses en la Bolsa de Metales de Londres subió por última vez un 1,4% a alrededor de US$ 9.022 la tonelada.
Se prevé que el aumento de la demanda y la escasa oferta probablemente eleven el precio de los niveles actuales para llegar a US$ 15.000 por tonelada para 2025.
Figura 1. Histórico de precios en el London Metal Exchange
Elemento clave para la energía limpia
Como metal rentable, el cobre es de gran importancia en el proceso de creación, almacenamiento y distribución de energía limpia, ya que tiene los atributos físicos necesarios para hacerlo, dijo en el informe el equipo de analistas de Goldman, dirigido por Jeff Currie.
“Las discusiones sobre el pico de la demanda de petróleo pasan por alto el hecho de que sin un aumento en el uso del cobre y otros metales clave, la sustitución de las energías renovables por petróleo no sucederá”, dijo el informe.
Se necesitará cobre para crear los nuevos sistemas de infraestructura necesarios para que la energía limpia reemplace al petróleo y al gas, sin embargo, hasta ahora no se ha prestado suficiente atención a esto, según el informe.
Por lo tanto, la demanda aumentará significativamente, hasta en un 900% a 8,7 millones de toneladas para 2030, si las tecnologías verdes se adoptan en masa, estima el banco. Si este proceso es más lento, la demanda seguirá aumentando a 5,4 millones de toneladas, o casi un 600%.
El cobre es una parte clave de las tecnologías sostenibles, incluidas las baterías de vehículos eléctricos y la obtención de energía limpia.
El presidente de minerales para las Américas de BHP, Ragnar Udd, expresó su optimismo por una demanda creciente en el cobre, durante la CRU World Copper Conference en Chile.
Un gran ejemplo son los vehículos eléctricos. Las señales de política para la adopción rápida de vehículos eléctricos fueron claramente favorables durante los últimos 12 meses y hemos revisado al alza nuestras previsiones internas de penetración de vehículos eléctricos, dijo Udd.
“Estos vehículos usan cuatro veces más cobre que los automóviles de gasolina, y también necesitarán más infraestructura para conectar las estaciones de carga a la red”.
En las actuales circunstancias, el mercado del cobre no está preparado para el aumento de la demanda, argumenta Goldman Sachs.
El precio del cobre ha aumentado alrededor de un 80% en los últimos 12 meses, pero no ha habido un aumento equivalente en la producción.
“El mercado ya está ajustado debido a que el estímulo económico a causa de la pandemia, particularmente en China, ha apoyado un resurgimiento de la demanda, frente a las estancadas condiciones de suministro”, dijo Goldman.
La brecha en el suministro
Dado que la expansión de las minas y la creación de nuevos campos de producción de cobre lleva años, es probable que esto conduzca a una escasez del metal. Para evitar un agotamiento del suministro de cobre en dos años, los precios deben subir ahora para fomentar la inversión y una expansión en la producción.
En la actualidad, Goldman Sachs estima una brecha de suministro a largo plazo de 8,2 millones de toneladas para 2030, el doble del tamaño de la brecha que provocó mercado alcista del cobre a principios de la década de 2000.
La producción de cobre disminuyó en 2020 debido a restricciones gubernamentales y bloqueos durante la pandemia Covid-19.
Los mayores productores de cobre del mundo, Chile y Perú, se vieron especialmente afectados por la pandemia, que podría afectar el suministro hasta 2023, según los analistas de materias primas S&P Global. La semana pasada, los precios se dispararon tras el cierre de la frontera chilena relacionado con la pandemia.
Sin embargo, se prevé que la producción mundial de cobre aumentará un 5,6% en 2021 después de haber disminuido un 2,6% en 2020, según un informe de GlobalData publicado en febrero.
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