Exxon prevé registrar unos beneficios más débiles en el cuarto trimestre de 2024 debido a unos márgenes en refinación más bajos.
Así lo informó la compañía en un comunicado a la Security Exchange Comission (SEC) esta semana y estimó la magnitud del impacto negativo en 1.750 millones de dólares.
Este impacto se vería parcialmente compensado por las ganancias derivadas de las ventas de activos de exploración y producción, señaló el supergrupo, pero su informe del cuarto trimestre seguiría presentando un deterioro del valor de unos 600 millones de dólares.
Según las estimaciones del London Stock Exchange (LSEG), Exxon obtendría un beneficio neto de 1,76 dólares por acción en el último trimestre del año pasado, frente a los 2,48 dólares por acción del cuarto trimestre de 2023.
El informe atribuye la debilidad de los resultados en el mercado descendente a una demanda de combustibles inferior a la prevista y al exceso de oferta de las nuevas refinerías de Asia y África que entraron en funcionamiento en 2024. También influyó el descenso de los precios del petróleo durante el trimestre.
Este sería el segundo trimestre consecutivo en el que Exxon registraría los efectos negativos de unos márgenes de utilidades en refinación más débiles.
La empresa también había advertido de este impacto en sus resultados del tercer trimestre. La actualización se produjo después de un segundo trimestre que superó las expectativas, en el que Exxon obtuvo su segundo mayor beneficio para un segundo trimestre en una década, ya que la adquisición de Pioneer Natural Resources impulsó una producción trimestral récord y la mayor producción de petróleo desde la fusión de Exxon y Mobil.
A pesar de la debilidad de los márgenes de refino el año pasado, a largo plazo Exxon prevé una mayor producción. En una actualización de diciembre, la compañía dijo que planeaba aumentar la producción en un 18% en los años hasta 2030, a 5,4 millones de barriles en ese año, en comparación con 4,58 millones de barriles diarios en 2024.
Exxon afirmó que el aumento se vería impulsado por una mayor producción en el Pérmico y Guyana. En el Pérmico, la compañía prevé que la producción alcance los 2,3 millones de barriles diarios, mientras que las operaciones en Guayana deberían aumentar hasta los 1,3 millones de barriles diarios en 2030.