El fabricante estadounidense de automóviles Tesla y su principal rival chino, BYD, alcanzaron un récord de entregas de sus vehículos fabricados en China en el segundo trimestre.
Los datos mostrados por la Asociación China de Vehículos de Pasajeros (China Passenger Car Association – CPCA), se producen en un momento en el que se intensifica la lucha por la cuota de mercado.
Tesla vendió 93.680 vehículos eléctricos fabricados en China en junio, un 18,72% más que un año antes, cuando la fábrica de Tesla en Shanghai entregó 78.906 vehículos Model 3 y Model Y fabricados en China después de que la ciudad pusiera fin a un bloqueo de dos meses COVID-19.
La automotriz estadounidense vendió 247,217 vehículos fabricados en China entre abril y junio, la mayor cantidad desde que comenzó a entregar vehículos desde Shanghái a principios de 2020, también mostraron los datos. Tesla reportó entregas récord de 466,140 a nivel mundial para el segundo trimestre.
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El rival chino BYD, con sus series Dynasty y Ocean de vehículos eléctricos e híbridos de gasolina-eléctricos, vio cómo las ventas de junio aumentaban un 88,16% interanual hasta los 251.685 vehículos, según los datos de CPCA.
Esta fue también la primera vez que las ventas mensuales de BYD superaron las 250.000 unidades y significó que, entre abril y junio, BYD entregó 700.244 vehículos, según los datos.
La CPCA estimó en 740.000 unidades las ventas totales de turismos de nueva generación, tanto nacionales como de exportación, incluidos los eléctricos puros y los híbridos enchufables, en junio, un 30% más que un año antes. No separó las ventas nacionales de las exportaciones.
El aumento de las ventas de estas empresas pone de manifiesto que están consiguiendo mantenerse por delante de sus competidores, a pesar de la ralentización de las ventas de automóviles en China en un contexto de debilitamiento de la economía.
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A principios de año, Tesla redujo drásticamente los precios de sus dos modelos más antiguos para impulsar las ventas e inició una guerra de precios que llevó a sus competidores, entre ellos BYD, a ofrecer descuentos o nuevos modelos más baratos.
El sector de los vehículos eléctricos también está recibiendo apoyo adicional del Gobierno chino, que quiere impulsar las ventas para apuntalar una recuperación económica vacilante.
En junio, Beijing anunció exenciones fiscales a la compra de vehículos de nueva energía por valor de 520.000 millones de yuanes (71.670 millones de dólares) hasta finales de 2027. Sin embargo, los límites a la exención fiscal pueden ayudar a impulsar el crecimiento de las ventas de modelos más baratos que son producidos principalmente por empresas nacionales en lugar de vehículos de alta gama de fabricantes extranjeros, según los analistas.
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