WindFloat Atlantic (WFA), la primera granja eólica flotante semi-sumergible del mundo, ha generado 320 GWh de energía durante sus cuatro años de operación.
El proyecto, ubicado frente a la costa de Portugal y lanzado en 2020 como una empresa conjunta al 50-50 entre EDP Renewables y ENGIE, ha superado las expectativas de rendimiento establecidas en su inauguración.
Según las empresas, la energía generada por la iniciativa está proporcionando energía limpia a 25,000 hogares de Portugal cada año.
«Estamos orgullosos de ver que nuestro proyecto avanza cada año hacia tener un impacto más positivo», dijo Jose Miguel Moreira Pinheiro, Director del Proyecto WindFloat Atlantic, en un comunicado.
Hito en la energía marina
El parque eólico consta de tres plataformas flotantes, cada una equipada con una turbina Vestas de 8.4 MW. Estas plataformas semi-sumergidas están ancladas al fondo marino, a 328 pies (100 m) de profundidad, utilizando cadenas, y están conectadas a una subestación eléctrica en Viana do Castelo, Portugal, a través de un cable de 12.4 millas (20 km).
Tres de las turbinas del proyecto han estado suministrando electricidad a la red nacional de Portugal desde julio de 2020, demostrando el potencial de la tecnología eólica flotante.
La producción de electricidad del proyecto ha aumentado de manera constante cada enero, con informes que afirman con orgullo que alcanzó 78 GWh en 2022 y 80 GWh en 2023.
Según un comunicado, con una producción acumulada total de 320 GWh hasta julio de 2024, puede suministrar electricidad a más de 25,000 hogares en Viana do Castelo anualmente, evitando la emisión de más de 33,000 toneladas de CO2 y generando 1,500 empleos directos e indirectos.
En sus cuatro años de operación, WFA ha superado de manera efectiva una serie de primicias. Durante la tormenta Ciaran en 2023, el sistema demostró ser resistente y fuerte, soportando olas de hasta 20 metros de altura y ráfagas de viento de hasta 139 kilómetros por hora.
La empresa gestora Ocean Winds afirma estar firmemente dedicada a rastrear y mejorar el desempeño ambiental de la WFA a lo largo de su vida útil de acuerdo con sus objetivos.
Según la empresa, más de 270 especies coexistieron con éxito con el proyecto, y no hubo efectos negativos sustanciales en los animales marinos ni en las especies de aves en peligro de extinción. Así, se ha encontrado que la iniciativa tiene una influencia mínima en el lecho marino y la biodiversidad.
Las encuestas también revelan que las estructuras flotantes han promovido la vida marina, lo que ha ayudado en la conservación submarina y la formación de arrecifes.
Con información de Interesting Engineering.