El oro alcanzó un nuevo máximo de siete años, ya que los inversores buscaron activos de seguridad por la preocupación de que el brote de coronavirus dañará el crecimiento global y, en medio de la especulación, la Reserva Federal aliviará la política monetaria antes de fin de año.
Los precios extendieron las ganancias por encima de los $ 1,600 la onza al nivel más alto desde febrero de 2013. El dólar se fortaleció y las acciones europeas cayeron después de un aumento en las infecciones confirmadas en Corea del Sur y muertes adicionales en Japón.
“Parece una profecía autocumplida”, dijo Georgette Boele, estratega de ABN Amro Bank NV. A medida que los precios estallaron, la medida ha atraído a más inversores al oro, dijo.
El refugio tradicional ha subido casi un 7% este año en medio de una creciente preocupación por los efectos del virus. Si bien minutos de la última reunión de la Fed indicaron que el banco central podría dejar las tasas sin cambios durante muchos meses, los operadores de futuros mantuvieron las expectativas de al menos un recorte en 2020.
El oro al contado avanzó por tercer día, agregando hasta un 0.4% el jueves para llegar a $ 1,618.79 la onza. Las participaciones en fondos negociados en bolsa global respaldados por lingotes han alcanzado un nuevo récord y están en camino de una sexta expansión semanal.
El oro podría alcanzar los $ 1,650 en las próximas semanas, de acuerdo con la unidad Global Wealth Management de UBS Group AG.
“Con las valoraciones de las acciones estadounidenses elevadas, cualquier trastorno adicional podría ver otro episodio de volatilidad, un nuevo repunte de los bonos del gobierno y un mayor precio del oro”, dijeron los analistas Wayne Gordon y Giovanni Staunovo en una nota.
Sin embargo, Boele de ABN Amro agregó una nota de precaución. Con el tiempo, los inversores buscarán obtener ganancias sobre el oro y cuanto más altos sean los precios, más agresiva será la venta futura, dijo.
Cotización de otros metales
En otros metales preciosos, el platino y la plata disminuyeron, mientras que el paladio se modificó poco, volviendo a cotizar por debajo de $ 2,800 la onza después de romper el nivel el miércoles para establecer un nuevo récord.
Los precios han sido respaldados por las preocupaciones sobre un déficit global cada vez mayor, y a medida que el gobierno chino se comprometió a estabilizar la demanda de automóviles.
El paladio ha aumentado un 40% este año. Sin embargo, las ganancias han sido eclipsadas por las de rodio, un metal menos líquido del mismo grupo que expandió nuevamente su avance anual hasta el 110%.
Tanto el rodio como el paladio están avanzando en el suministro limitado y la demanda de la industria automotriz sigue siendo fuerte, dijo Anglo American Plc el jueves.
Sin embargo, eso no significa que los precios no retrocedan en el corto plazo, dijo a los inversores el director ejecutivo Mark Cutifani.
“Lo que sube rápidamente puede bajar el doble de rápido”, dijo.
Noticia de: Bloomberg.com / Traducción libre del inglés por WorldEnergyTrade.com
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