El Paladio ha experimentado una increíble escalada en lo que a su precio se refiere y algunos hablan que podría llegar a venderse hasta en 3.000 dólares por onza, en vista que con un solo día de diferencia su precio se ha incrementado en un 0,40% costando aproximadamente 2.390 dólares

Durante la última semana la ganancia alcanzaba un 2,68%, pero se espera una escalada de 40,43% en período de doce meses precedentes en lo que al paladio se refiere, el cual ha superado en 800 dólares el precio de la onza de oro que en la actualidad esta cerca de los 1.560 dólares. Ello en gran medida obedece al incremento de la demanda de paladio que se ha presentado, por los requerimientos para la fabricación de catalizadores, más modernos y los cuales requieren mayor cantidad de metal.
El paladio posee un sinfín de aplicaciones y es muy escaso, algunas de los elementos que pueden estar contribuyendo al incremento de su precio, siendo las leyes del mercado las que están mandando. Es excelente catalizador para los coches de gasolina y diésel por sus propiedades fisicoquímicas, es usado en la industria de la joyería, así como también en los condensadores y otros componentes de dispositivos electrónicos, y pronto muchos esperan llevar a cabo la fusión fría donde este metal juega un importante papel.
Este metal, cuyos depósitos más grandes se encuentran en Sudáfrica y Rusia, pertenece al grupo del platino, pero es menos denso y con un punto de fusión más bajo, siendo capaz de absorber grandes cantidades de hidrógeno molecular (H2) a temperatura ambiente debido a que puede absorber hasta 900 veces su propio volumen en hidrógeno molecular. Se encuentra también, pero en menor cantidad en Filipinas, Canadá y Estados Unidos.
La localización de las fuentes principales de paladio es otro de los factores que entra en juego al momento de ser vendido y es que su suministro se ha visto interrumpido en varias oportunidades especialmente cuando proviene desde Suráfrica, según los datos aportados por el experto en el mercado del oro y otros minerales, además de director de la Fundación Stabilitas, Sputnik Martin Siegel, “su demanda se ha incrementado progresivamente a nivel mundial por ello ha alcanzado un precio récord (…) y no está del todo claro cuando parará de crecer:”
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