Jeff Bezos y tres pasajeros más lograron, el martes 20 de julio, llegar más allá del borde del espacio, cuando la nave New Shepard de Blue Origin completó con éxito su primer lanzamiento con tripulación, logrando retornarlos sanos y salvos a la Tierra.
Producto de una inversión de miles de millones de dólares, de decenas de lanzamientos de prueba, el triunfo de la nave New Shepard, junto con el de Virgin Galactic a principios de este mes, anuncian sin duda el inicio de una nueva era del turismo espacial.
Fue todo un espectáculo mediático. La misión tuvo lugar en el Launch Site One, la extensa y secreta instalación de Blue Origin situada a unos cincuenta kilómetros al norte de la pequeña ciudad de Van Horn, Texas.
Toda esta acción, desde el despegue hasta el aterrizaje, duró poco más de 10 minutos. Pero fue sin duda la experiencia de su vida para los cuatro pasajeros.
Figura 1. Lanzamiento y aterrizaje completo del New Shepard
Todos los hoteles de Van Horn y de los pueblos cercanos agotaron sus habitaciones en los días previos al lanzamiento, ya que los espectadores se desplazaron para asistir al evento. Mientras tanto, un enorme grupo de medios de comunicación locales, nacionales y en línea se dieron cita en el sitio de prensa a partir de las 2:30 AM CST.
Vuelo de ida y vuelta al espacio
A pesar de algunos avisos prematuros de lluvia en las primeras horas de la mañana, el cielo se mantuvo despejado y todo se ajustó a lo previsto.
La tripulación de cuatro personas salió del centro de formación y tomó un todoterreno eléctrico Rivian R1S hasta la plataforma de lanzamiento unos 45 minutos antes del lanzamiento.
Bezos también condujo una camioneta Rivian R1T hasta el lugar de aterrizaje del cohete tras su última prueba, esto es un aval a la considerable inversión de Amazon en la startup de vehículos eléctricos.
La tripulación subió a la torre de lanzamiento y luego de un breve descanso en un refugio adyacente, antes de subir a la cápsula, bautizada como RSS First Step.
Hubo una breve pausa a los 15 minutos, lo que hizo que el lanzamiento se retrasara ligeramente. El New Shepard despegó a las 8:11 CST. Pasaron la línea Kármán a las 8:15, a continuación, se produjo la separación de la cápsula, y el propulsor regresó al lugar de lanzamiento de forma autónoma y con un fuerte estruendo a las 8:19.
La cápsula tripulada flotó lentamente hacia la Tierra mediante un paracaídas, tocando tierra a las 8:22 AM para un tiempo total de vuelo de once minutos.
El vuelo fue el resultado de quince pruebas del cohete suborbital reutilizable New Shepard, incluido un ensayo de lanzamiento en abril con un simulacro de preparación del vuelo y un simulacro de embarque de la tripulación en la cápsula, para luego desembarcar antes del despegue.
Blue Origin se une ahora a su competidor Virgin Galactic en un grupo muy, muy reducido de empresas espaciales comerciales que enviarán a ciudadanos particulares a la órbita de la Tierra.
Dos décadas para ir al espacio
Bezos fundó Blue Origin en el año 2000, seis años después de fundar el gigante del comercio electrónico Amazon. La empresa de vuelos espaciales trabajó de forma sigilosa durante una década, manteniéndose generalmente fuera de la vista del público.
Eso cambió en 2010, cuando Blue Origin consiguió un contrato del Programa de tripulación comercial de la NASA, que pretendía fomentar el desarrollo de taxis privados de astronautas estadounidenses para ocupar el lugar del transbordador espacial, que estaba a punto de retirarse.
La empresa consiguió otro contrato al año siguiente, pero no consiguió el gran contrato; la NASA anunció en 2014 que había seleccionado los vehículos construidos por SpaceX y Boeing, cápsulas conocidas como Crew Dragon y CST-100 Starliner, respectivamente.
Blue Origin siguió trabajando en sus propios vehículos, incluido el New Shepard, diseñado para transportar personas y cargas útiles en breves viajes al espacio suborbital.
La empresa se ha centrado en el turismo espacial, y considera este vuelo como la prueba de concepto necesaria para empezar a volar con clientes.
Para ello, la cápsula New Shepard cuenta con grandes ventanas para el turismo, las más grandes de la historia de los vuelos espaciales, según la empresa.
“Estas ventanas constituyen un tercio de la cápsula, sumergiéndote en la inmensidad del espacio y en las vistas de nuestro planeta azul que te cambian la vida”, dice en la página web de Blue Origin.
El lanzamiento es también la culminación de semanas de disputas entre Bezos y su multimillonario rival en el ámbito espacial, Richard Branson, que se embarcó en su propio vuelo al espacio 10 días antes.
A pesar de que aparentemente Virgin Galactic le tomó la delantera a Blue Origin, existe la disputa sobre lo que realmente cuenta como espacio, y si el VSS Unity, el avión espacial impulsado por cohetes de Virgin Galactic, realmente llegó allí.
La disputa gira en torno a lo que se conoce como la línea de Kármán, un límite imaginario generalmente reconocido, pero no estrictamente definido del espacio que comienza donde la atmósfera se vuelve demasiado delgada para volar con medios ordinarios.
El VSS Unity voló hasta unos 85,9 kilómetros, por encima del límite reconocido por la NASA y la Fuerza Aérea de Estados Unidos, pero otras autoridades sitúan la línea más cerca de los 100 kilómetros.
Desde el principio, el New Shepard se diseñó para volar por encima de la línea Kármán. Para el 96% de la población mundial, el espacio comienza a 100 km de altura en la línea Kármán, reconocida internacionalmente.
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