Se espera que el mercado europeo residencial de sistema de almacenamiento de energía en baterías (battery energy storage systems, BESS) continúe su trayectoria ascendente en los próximos años después de que se instalaran 745MWh de capacidad adicional en 2019, lo que representa un aumento del 57% con respecto al año anterior.
Esto es según un nuevo análisis del organismo comercial SolarPower Europe, que dice que la capacidad total instalada alcanzó casi 2GWh a finales de 2019 y reveló que existe un “importante potencial de mercado sin explotar” ya que sólo el 7% de la energía fotovoltaica residencial europea está acoplada al almacenamiento de baterías.
Si bien se espera que COVID-19 tenga un impacto en el mercado en 2020, con un crecimiento interanual previsto del 9%, este impacto es menor de lo que se pensaba debido a la resistencia del mercado alemán.
Con casi 500MWh instalados y una cuota de mercado del 66%, Alemania es, con mucho, el principal mercado de almacenamiento de energía en el sector residencial de Europa. En 2019, el país instaló 63.000 sistemas de almacenamiento de energía en baterías residenciales con una capacidad total de alrededor de 496MWh.
En total, los cinco principales países europeos – Alemania, Italia, el Reino Unido, Austria, Suiza – representan más del 90% del mercado europeo.
Michael Schmela, asesor ejecutivo de SolarPower Europe, dijo que ahora se necesitan esfuerzos para ampliar el impulso de los mercados pioneros en todo el continente.
“Con los instrumentos europeos del Green Deal, como la UE de la próxima generación, y los planes nacionales de recuperación, hay una gran caja de herramientas disponible para continuar esta trayectoria en crecimiento”.
A pesar de la ralentización del crecimiento este año, el despliegue del almacenamiento de energía doméstico se acelerará de nuevo en 2021.
Según el escenario medio más probable de SolarPower Europe, se espera que la tasa de crecimiento anual se sitúe de nuevo en el rango de los dos dígitos, en un 14% en 2021, impulsada por los paquetes de recuperación, para luego disminuir a una tasa de crecimiento del 11% en 2022, antes de pasar al 13% en 2023 y al 16% en 2024.
Este escenario prevé que el límite de incremento en capacidad de almacenamiento de energía de 1GWh se alcance en 2022, lo que corresponde a aproximadamente 140.000 nuevos sistemas instalados por año.
El análisis dice que en un sistema de energía 100% renovable, el almacenamiento de electricidad se vuelve crucial para proporcionar un suministro de energía ininterrumpido, respaldando hasta el 24% de la demanda de electricidad europea.
“Para lograrlo, la capacidad instalada distribuida de BESS debe aumentar a 900GWh para 2030 y a 1.600GWh para 2050, lo que supone un inmenso crecimiento con respecto al nivel instalado hoy en día”, ha declarado Raffaele Rossi, coordinador de SolarPower Europe’s Solar Storage Workstream.
“Los responsables políticos europeos y nacionales deberían reconocer este enorme potencial y promover el almacenamiento distribuido en sus planes energéticos y climáticos”.
Noticia tomada de: Energy Storage / Traducción libre del inglés por WorldEnergyTrade.com
Te puede interesar:
- IEA: un fuerte auge en innovación de baterías es clave en la transición energética
- China promete ser carbono neutral para el 2060, pero ¿Cómo puede lograrlo?
- 5 tecnologías que están cambiando el futuro de la energía renovable
