Las exportaciones de gas natural licuado de Estados Unidos se están disparando bajo el mandato del presidente Biden, eclipsando los récords anteriores y con la intención de subir aún más.
A pesar de que la administración se compromete a luchar contra el cambio climático, en parte distanciando a Estados Unidos de los combustibles fósiles, las exportaciones de GNL del país alcanzaron un nuevo récord en marzo, según datos de la U.S. Energy Information Administration.
Este aumento pone de manifiesto todo un reto para Biden, que se enfrenta a la presión ejercida por el flanco izquierdo de su partido y por los grupos ecologistas para que abandone los combustibles fósiles, aunque los partidarios del gas digan que el combustible ayudaría a reducir las emisiones globales al alejar a los países del carbón.
A los representantes del sector les preocupa que los mensajes contradictorios o el tibio apoyo del gobierno federal al GNL lleven a los compradores extranjeros a cuestionar el compromiso de Estados Unidos y a buscar importaciones de energía en otros lugares.
La administración Biden está en apuros
La administración Biden podría definir mejor cómo encaja el GNL en sus objetivos de política climática, dijo Anna Mikulska, investigadora no residente en estudios energéticos del Instituto Baker de la Universidad Rice.
La administración sigue siendo “bastante confusa o vaga” en ese aspecto, dijo Mikulska. En ocasiones, los comentarios de altos funcionarios como la secretaria de Energía, Jennifer Granholm, y el enviado de EE.UU. para el clima, John Kerry, han parecido entrar en conflicto entre sí, dijo.
Kerry hizo saltar las alarmas del sector en enero, cuando advirtió en un discurso ante el World Economic Forum que si el mundo sigue construyendo infraestructuras para el gas, “nos vamos a quedar con activos varados en 10, 20 o 30 años”.
Por el contrario, Granholm ha dicho que las exportaciones de GNL en Estados Unidos se envían a menudo a “países que, de otro modo, utilizan combustibles muy intensivos en carbono”
“El gobierno de Biden está en un pequeño aprieto”, dijo Mikulska, señalando que la aceptación del gas natural podría ser vista como un debilitamiento en los objetivos climáticos del gobierno.
Mientras tanto, algunas empresas de GNL han empezado a invertir en tecnologías costosas como la captura y el almacenamiento de carbono, entre otras medidas para reducir la contaminación por CO2.
A nivel mundial, el sector del GNL está sometido a una presión cada vez mayor para “demostrar sus credenciales ecológicas”, dijo Alex Munton, analista principal de Wood Mackenzie para la investigación del GNL.
El récord de exportación de GNL de Estados Unidos
Las exportaciones de GNL establecieron un récord histórico en marzo de 2021 en 10,5 Bcf / d y promediaron 9,2 Bcf / d en abril, de acuerdo a los datos de la EIA.
Según estimaciones de la EIA, las exportaciones estadounidenses de GNL promediaron 10,0 Bcf / d en mayo, la mayor cantidad registrada para ese mes desde que EE. UU. comenzó a exportar en 2016.
De hecho, todos los meses desde noviembre de 2020 han estado entre los 10 meses más altos registrados en las exportaciones de GNL de EE. UU., señaló la EIA.
Debido a esta fuerte demanda global de GNL, la EIA pronostica que las exportaciones de GNL de EE. UU. continuarán siendo altas y promediarán más de 9,0 Bcf / d durante el resto de 2021.
Noticia tomada de: E&E News / Traducción libre del inglés por World Energy Trade
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