Un nuevo estudio muestra una caída de 1.100 millones de dólares en los presupuestos de exploración de oro este año, ya que las juniors luchan por conseguir capital, pero el metal precioso sigue representando el 46% del total.
Según un nuevo estudio de S&P Global Market Intelligence, los presupuestos generales de exploración minera cayeron este año por primera vez desde 2020, con un descenso del 3% a 12.800 millones de dólares en las 2.235 empresas que asignaron fondos para encontrar o ampliar yacimientos.
Los presupuestos de oro, que históricamente han sido impulsados más por el sector minero junior que por cualquier otro metal o mineral, cayeron un 16% o 1.100 millones de dólares interanuales a poco menos de 6.000 millones de dólares, lo que representa el 46% del total mundial.
Esta cifra es inferior al 54% de 2022, en un contexto de mayor gasto en litio, níquel y otros metales para baterías, un aumento del gasto en uranio y tierras raras y un repunte del cobre.
Pero el papel dominante que desempeña el oro en la exploración -y, por tanto, el futuro del sector- queda claro por el hecho de que el dinero combinado que fluye hacia los metales de transición de la energía verde (o materias primas de cara al futuro, como les gusta etiquetarlas a algunas grandes empresas) no fue suficiente para compensar el descenso del oro.
Los presupuestos de exploración de oro, como la mayoría de las materias primas mineras, alcanzaron su máximo en 2012, cuando el metal precioso representó casi la mitad de los más de 20.000 millones de dólares gastados.
Las juniors auríferas representan el 38% de la asignación a exploración este año y la reducción del gasto por parte del sector fue responsable de la mayor parte de la reducción global de los presupuestos.
También sigue la tendencia de años en el sector del oro identificada por S&P Global, donde la exploración se ha desplazado a los emplazamientos mineros y se ha alejado de la exploración de base.
Canadá, la principal región para la exploración de oro gracias en gran parte a su vibrante sector junior, experimentó un descenso de unos 400 millones de dólares en los presupuestos. Sólo en Asia-Pacífico aumentaron los recursos asignados en comparación con 2022, aunque no mucho y partiendo de una base baja.
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Ictericia de las junior
El retroceso entre los exploradores de oro representa una caída significativa en comparación con el año pasado, cuando el sector gastó más que las grandes empresas en la búsqueda del metal precioso.
Es un indicio de la dificultad que han tenido las empresas de exploración junior durante el último año para acceder a los mercados en busca de nueva financiación.
Sobre una base trimestral, la financiación de oro para las mineras junior y medianas fue la más baja en el tercer trimestre desde el trimestre de septiembre de 2018.
La financiación global, excluyendo a las majors con 8.000 millones de dólares en lo que va de año, fue la más baja desde 2019 y menos de la mitad recaudada en el mismo periodo del año pasado.
Al igual que con los presupuestos de exploración, la disminución general de las financiaciones se produjo a pesar de que las empresas mineras involucradas en productos básicos especializados lograron recaudar un 46% más en el año hasta finales de septiembre que en el mismo período del año anterior.
En conjunto, los 41.086 sondeos perforados en todo el mundo desde enero hasta mediados de octubre de 2023 en busca de metales no férreos y minerales representan un descenso del 23% en comparación con el año pasado.
Noticia tomada de: MINING / Traducción libre del inglés por World Energy Trade
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