Una juez Federal de Estados Unidos dictaminó el viernes 16 que los bonos 2020 de la petrolera estatal venezolana Petróleos de Venezuela son ”válidos y ejecutables”, según mostró el documento judicial.
La demanda se estableció el año pasado para evitar que los acreedores se apoderaran de una participación en Citgo, que se utilizó como garantía para respaldar los bonos de 2020.
El dictamen establece que los tenedores de bonos tienen reclamos válidos sobre la preciada refinería de petróleo de Venezuela, Citgo Petroleum Corp.
El dictamen de la Juez Federal
Este viernes, la Juez Federal de distrito Katherine Polk Failla rechazó la solicitud de declarar inválidos los bonos y dijo que MUFG Union Bank, un fideicomisario, puede buscar la venta de la garantía.
La decisión de la Juez a favor de los acreedores de Venezuela no pone en peligro de inmediato el control venezolano de la refinería de 760.000 bpd. En este caso, el apoyo a la estabilidad de los mercados de bonos superó el apoyo de Washington al gobierno de oposición de Venezuela, lo cual deja la propiedad de Citgo a los tribunales de apelación y las decisiones de la Casa Blanca con respecto a las sanciones.
La Juez Federal dictaminó que “se ha producido un incumplimiento” de los bonos, desestimando el argumento de que los bonos no eran válidos.
“Venezuela no tiene poder, salvo por las acciones de este tribunal o la intervención de Estados Unidos, para impedir que los acusados hagan cumplir sus recursos contractuales”, dijo Failla. “Y es esa impotencia para completar la expropiación lo que deja claro que no se ha producido ningún despojo en Venezuela”.
El enviado especial del Departamento de Estado de Estados Unidos para Irán y Venezuela, Elliott Abrams, había advertido en una carta al tribunal que la pérdida de Citgo “sería muy perjudicial y quizás irrecuperable” para los objetivos de la política exterior estadounidense. Pero el gobierno de Estados Unidos también señaló en los documentos la importancia de preservar las leyes que rigen los contratos y los bonos.
Un fallo favorable al gobierno pondría en riesgo el estatus de Nueva York como centro financiero global, la estabilidad de los mercados financieros e invitaría a más acciones de “gobiernos extranjeros menos honestos” para expropiar fondos de los acreedores, dijo Failla.
Los tenedores de bonos tienen derecho a apoderarse y vender la participación controladora en Citgo que Venezuela colocó como garantía en el acuerdo de deuda de 2016.
Pero el fallo no allana el camino para que los acreedores se apoderen de acciones de la matriz de Citgo. El gobierno de Estados Unidos ha utilizado sus sanciones contra Venezuela, también, para evitar que los tenedores de bonos tomen tal acción hasta al menos enero de 2021.
El caso continuará en Nueva York dentro de 45 días, con los tenedores de bonos presentando un cálculo de los intereses asociados con los aproximadamente US$ 1.7 mil millones adeudados al tenedor de bonos MUFG.
Es casi seguro que el caso ingresará en una suspensión automática y luego procederá al Tribunal de Apelaciones del Segundo Circuito de EE.UU. Venezuela está perdiendo el control de Citgo, la empresa se aleja en cámara muy lenta.
Algunos antecedentes respecto a los bonos PDVSA 2020
Una junta directiva nombrada por el presidente venezolano Nicolás Maduro emitió en 2016 una obligación de US$ 3,400 millones respaldada por la mayoría de las acciones de Citgo.
Luego, el equipo del presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Juan Guaidó, tomó el control de Citgo el año pasado después de que el gobierno de Estados Unidos lo reconoció como el líder legítimo de Venezuela con el argumento de que Maduro manipuló su reelección de 2018.
El gobierno reconocido por EE.UU. incumplió en octubre de 2019 con US$ 842 millones en capital y US$ 72 millones en intereses respaldados por una participación del 50.1% en Citgo.
El gobierno demandó en octubre pasado para que los bonos se declararan inválidos. La ley venezolana requería que la Asamblea Nacional aprobara el canje de 2016 que reemplaza los bonos de PDVSA que vencieron en 2017 y estaban cerca del incumplimiento, argumentaron.
La emisión de los bonos se hizo sin la aprobación de la Asamblea Nacional de Venezuela y el cuerpo legislativo declaró ilegal la transacción.
En un comunicado el viernes por la tarde, el equipo de Guaidó dijo que consideraría apelar la decisión y calificó la emisión de los bonos como “absolutamente fraudulenta”.
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