Los ingresos de Rusia por petróleo y gas alcanzaron los 13.500 millones de dólares (1,23 billones de rublos rusos) en abril, según mostraron el lunes los datos del Ministerio de Finanzas ruso.
El Kremlin recibió para el presupuesto ruso casi el doble de ingresos petroleros que en el mismo mes de 2023, según las estimaciones de Bloomberg.
Un rublo ruso más débil y el precio más alto del crudo insignia de los Urales de Rusia en medio de precios internacionales del petróleo más altos contribuyeron a mayores ingresos de impuestos relacionados con el petróleo y de todas las ventas totales de petróleo y gas, según los cálculos de Bloomberg.
El presupuesto ruso recibió hasta 11.550 millones de dólares (1,053 billones de rublos) en forma de impuestos relacionados con el petróleo en abril de 2024, frente a los 5.450 millones de dólares (497.000 millones de rublos) del mismo mes de 2023, de acuerdo con las estimaciones de Bloomberg basadas en los datos publicados hoy por el Ministerio de Finanzas.
El aumento de los ingresos de Rusia procedentes del petróleo pone de manifiesto las dificultades de los países occidentales para reducir los ingresos de Putin procedentes del petróleo, a pesar del tope impuesto al precio del petróleo ruso y de la intensificación de la aplicación de sanciones en los últimos meses.
El mes pasado, los cálculos de Reuters también mostraron que se esperaba que el aumento de los precios del petróleo duplicara los ingresos de Rusia por petróleo y gas en abril en comparación con el mismo mes del año pasado.
De acuerdo con las estimaciones, Rusia se embolsó 14.000 millones de dólares (1,292 billones de rublos rusos) procedentes del petróleo y el gas en abril. Esta cifra es el doble de los 7.000 millones de dólares (648.000 millones de rublos) que Rusia recibió del petróleo y el gas en abril del año pasado.
Los ingresos de Rusia por petróleo y gas se desplomaron un 23,9% el año pasado en comparación con 2022, ya que la bajada de los precios del petróleo y la reducción de las exportaciones de gas por gasoducto lastraron los ingresos presupuestarios procedentes de los combustibles fósiles, según mostraron los datos del Ministerio de Finanzas ruso a principios de enero.
El crudo ruso, que está prohibido en Occidente, encuentra compradores en China y la India, mientras que el GNL ruso -no sancionado por la UE ni por EE.UU.- está llegando a los puertos europeos, que han aumentado la entrada de cargamentos de GNL en los dos últimos años, incluidos los procedentes de instalaciones rusas de exportación de GNL.