A partir de hoy, la ciudad de Sydney que el año pasado establecia un objetivo del 100% de energías renovables, ahora funcionará completamente con energía renovable generada por granjas eólicas y solares en la región de Nueva Gales del Sur.
Todas las operaciones de la ciudad de Sydney – incluyendo las luces de las calles, piscinas, campos deportivos, depósitos, edificios y el histórico Ayuntamiento de Sydney – ahora funcionarán con electricidad 100% renovable proveniente de proyectos solares y eólicos locales. El cambio forma parte de un acuerdo de 60 millones de dólares con la empresa minorista de electricidad Flow Power, el mayor acuerdo independiente de energía verde de su tipo realizado por un consejo en Australia.
Se prevé que el acuerdo ahorrará a la ciudad hasta medio millón de dólares al año durante los próximos 10 años, y reducirá las emisiones de carbono en unas 20.000 toneladas al año, lo que equivale al consumo de energía de más de 6.000 hogares.
La Ciudad calcula que el nuevo acuerdo le permitirá alcanzar su objetivo de reducir las emisiones en un 70% para el 2024, seis años antes.
“Estamos en medio de una emergencia climática. Si queremos reducir las emisiones y hacer crecer el sector de la energía verde, todos los niveles de gobierno deben hacer una transición urgente a la energía renovable”, dijo el miércoles la alcaldesa Clover Moore.
El acuerdo de compra de energía permitirá a la ciudad obtener energía renovable de la granja solar Bomen de 120 MW en Wagga Wagga, la granja eólica Sapphire de 270 MW cerca de Inverell, y la granja solar Shoalhaven de 3 MW, un plan solar sin fines de lucro de propiedad comunitaria cerca de Nowra en la costa sudeste de Nueva Gales del Sur. El acuerdo verá tres cuartas partes de la energía de la ciudad provenir de la generación eólica y una cuarta parte de la solar.
“Este es un logro histórico para la ciudad de Sydney. Si las organizaciones pueden seguir los pasos de la ciudad, es posible lograr un futuro con cero emisiones de carbono”, dijo el director general de Flow Power, Matthew van der Linden.
“La ciudad está directamente emparejada con estos proyectos renovables, un movimiento que apoya la integración de las energías renovables en el sistema”.
Uno de los primeros proyectos en Australia para instalar paneles bifaciales, el Parque Solar Bomen comenzó a exportar a la red eléctrica en marzo. El proyecto fue adquirido el año pasado por el propietario de la infraestructura de la red eléctrica, Spark Infrastructure, en el importante cambio estratégico de la empresa hacia la propiedad de activos de generación de energía renovable. Además de la PPA con Flow Power, el proyecto Bomen tiene una segunda PPA con Westpac, como parte del compromiso del banco con un objetivo de 100% de renovables.
El segundo activo solar cubierto por el acuerdo, el proyecto solar Shoalhaven, está siendo desarrollado por Flow Power en asociación con el grupo comunitario local Repower Shoalhaven, una empresa comunitaria voluntaria sin fines de lucro que desarrolla proyectos solares comunitarios. Con un costo de construcción de cerca de 5 millones de dólares, el parque solar costero aportará una inversión adicional a la región y proporcionará oportunidades de empleo local durante la construcción y el funcionamiento. El proyecto generará suficiente energía para alimentar cerca de 1.000 hogares de Nueva Gales del Sur.
“La granja solar de Shoalhaven no podría haber entrado en funcionamiento sin la inversión de la ciudad. Al asociarnos con este proyecto, estamos creando puestos de trabajo locales y ayudando a que el sector de las energías renovables crezca”, dijo el miembro Bob Hayward, en nombre de Repower Shoalhaven.
Iniciativas de eficiencia energética
Desde 2016, la ciudad ha estado invirtiendo en iniciativas de eficiencia energética, como la instalación de luces solares en los tejados y luces LED, lo que se ha traducido en importantes ahorros para los contribuyentes. La sustitución de 6.500 farolas con LED, por ejemplo, ha ahorrado a los contribuyentes 800.000 dólares al año.
Uno de sus proyectos más notables hasta la fecha es el Depósito del Canal de Alexandra en Alejandría, que funciona con 1.600 paneles solares y cuenta con la primera batería Tesla a escala de red del estado, que puede almacenar hasta 500 kWh de electricidad. La ciudad de Sydney y Transgrid fueron los socios del proyecto que realizaron esta aplicación como parte de una prueba de almacenamiento de energía detrás del medidor.
Además, la ciudad ha instalado paneles solares en más de 30 de sus edificios de oficinas, piscinas, bibliotecas y centros comunitarios, incluyendo los Mercados de Sydney (8.594 paneles), Andrew (Boy) Charlton Pool (85 paneles), el Ayuntamiento de Sydney (240 paneles), Redfern Oval (211 paneles), el edificio del Australia Post en Cleveland Street (más de 1000 paneles), la Biblioteca de Surry Hills (32 paneles), así como el Centro Internacional de Convenciones de Sydney en Darling Harbour, que alberga una instalación solar fotovoltaica de 520 kW financiada por la comunidad. En el conjunto de Darling Harbour, los paneles solares son propiedad del público en general.
Para mediados de 2021, la ciudad planea tener más de 7.800 paneles solares generando energía para sus edificios. También se ha asociado con Ausgrid para acelerar la actualización de 9.500 luces de calle de propiedad de la empresa a LED, lo que ahorrará alrededor de 1 millón de dólares en costos anuales de mantenimiento y energía.
Mientras que la ciudad de Sydney fue el primer gobierno local de Australia en lograr la certificación de carbono neutral en 2011, Melbourne fue la primera capital australiana que se alimentó de energía 100% renovable. El miércoles, la ciudad de Sydney se unió a la ciudad de Adelaida para anunciar un cambio completo a la energía 100% renovable.
Noticia tomada de: PV Magazine / Traducción libre del inglés por WorldEnergyTrade.com
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