El mayor exportador de crudo del mundo, Arabia Saudí, busca evitar que su economía se sobrecaliente y eleve la inflación, ya que pretende impulsar el crecimiento de su sector no petrolero.
El ministro saudí de Finanzas, Mohammed Al-Jadaan, declaró esta semana que conceder más tiempo para poner en marcha los enormes proyectos de inversión previstos en el plan Visión 2030 para diversificar la economía dependiente del petróleo podría ser una medida acertada.
«Si no permites que tu economía se ponga al día con tus proyectos, básicamente lo que ocurrirá es que importarás mucho más», declaró el ministro en el Foro Económico de Qatar celebrado en Doha el martes, según recoge Bloomberg.
El Reino tiene que tener cuidado de no llegar a un punto en el que la economía alcance el límite de su capacidad para satisfacer la demanda del gobierno y de los particulares, dijo Al-Jadaan.
Este punto, comúnmente conocido como una economía sobrecalentada, conduce a una alta inflación y a fugas. En economía, un ejemplo de fuga son los mayores volúmenes de bienes importados porque transfieren los ingresos obtenidos en un país a otro.
Si Arabia Saudí no permite que su economía tome el ritmo de sus enormes proyectos de inversión, valorados en miles de millones de dólares, puede acabar careciendo de la capacidad de fabricación y de otro tipo, necesaria para respaldar sus planes, señaló Al-Jadaan.
«Así que darle más tiempo es en realidad prudente», dijo en el Foro Económico de Qatar, Powered by Bloomberg. «En realidad, el problema no es la financiación», añadió el ministro. «En realidad son las fugas económicas».
Algunos proyectos de Visión 2030 podrían retrasarse
Arabia Saudí ha empezado a admitir en los últimos meses que daría prioridad a algunos proyectos que forman parte del plan Visión 2030 del príncipe heredero Mohammed bin Salman, mientras que posiblemente retrasaría otros.
A finales del año pasado, Arabia Saudí reconoció por primera vez que algunos de los proyectos de su plan Visión 2030 para diversificar su economía lejos del petróleo se están retrasando para evitar presiones sobre la economía.
El Reino necesita más tiempo para «construir fábricas, construir incluso recursos humanos suficientes», dijo el ministro Al-Jadaan en diciembre.
«El retraso o más bien la prórroga de algunos proyectos servirá a la economía», declaró entonces a Bloomberg.
«Hay estrategias que se han pospuesto y hay estrategias que se financiarán después de 2030», dijo Al-Jadaan a Bloomberg sin especificar qué proyectos se retrasan.
El príncipe heredero «podría estar finalmente listo para tener algunas conversaciones duras» sobre qué proyectos podrían acelerarse y cuáles pueden esperar para desarrollarse, dijo este mes al Financial Times una fuente familiarizada con el pensamiento del fondo soberano de Arabia Saudí, el Fondo de Inversión Pública.
Previsiones conservadoras de ingresos petroleros
A pesar de las posibles discusiones sobre recalibrar el calendario de los costosos proyectos, Arabia Saudí sigue siendo optimista sobre la posibilidad de llevar a cabo el plan Visión 2030 para que su economía no petrolera crezca con el turismo y la tecnología.
El Reino ha visto cómo su sector no petrolero crecía de forma constante en los últimos años, con más ingresos procedentes de actividades no petroleras, afirmó Al-Jadaan en el foro celebrado esta semana en Qatar.
Este aumento de los ingresos para el Estado, unido a una previsión conservadora sobre los ingresos procedentes del petróleo, ayudaría a Arabia Saudí con los planes de financiación de los numerosos proyectos futuristas de Visión 2030, añadió.
«Somos muy conservadores en nuestras previsiones y, por tanto, en nuestros planes sobre cómo los ingresos del petróleo cubrirán ese gasto», señaló el ministro.
El sector no petrolero y las actividades gubernamentales crecieron en el primer trimestre de 2024, pero un descenso del 10,6% en las actividades petroleras, arrastró el PIB del Reino en un 1,8% en comparación con el mismo período de 2023, dijo la Autoridad General de Estadísticas de Arabia Saudí a principios de este mes.
Las actividades no petroleras aumentaron un 2,8% y las actividades gubernamentales crecieron un 2,0% anual en el primer trimestre de 2024.
El PIB real desestacionalizado aumentó un 1,3% en el primer trimestre de este año en comparación con el cuarto trimestre de 2023, impulsado por un aumento del 2,4% en las actividades petroleras, junto con un crecimiento del 0,5% en las actividades no petroleras.
Los ingresos del Estado procedentes del sector petrolero aumentaron un 2% interanual en el primer trimestre, mientras que los ingresos no petroleros aumentaron a un ritmo más rápido, un 9%, para impulsar un aumento global del 4% en los ingresos presupuestarios totales, según mostraron los datos oficiales a principios de mayo.
No obstante, Arabia Saudí registró un déficit presupuestario en el primer trimestre de 2024, debido al aumento de los gastos, que superaron a los ingresos públicos.
Por otra parte, la inflación en el Reino se mantiene estable y por debajo de los niveles mundiales, lo que podría dar garantías a los funcionarios y financieros de Arabia Saudí de que la economía no está a punto de entrar en una fase de sobrecarga.
La tasa de inflación anual en Arabia Saudí fue del 1,6% en abril de 2024, igual que la tasa de inflación anual de marzo. El índice de precios al consumo (IPC) subió un 0,3% en abril en comparación con marzo de 2024.
Los funcionarios saudíes han empezado por fin a reconocer que algunos costosos proyectos futuristas podrían tener que esperar más tiempo para su desarrollo, para evitar que se tambalee la economía del primer exportador mundial de crudo, lo que podría repercutir en el mercado mundial del petróleo y en la economía.