Argentina cuenta con el primer pueblo totalmente dependiente de la energía solar. La población de Jujuy se encuentra ubicada en el noroeste del país, en un valle fértil, rodeado de montañas y donde convergen los ríos Grande y Xibi Xibi y es más conocida como “tacita de plata” y se ha convertido en la nueva capital de las energías renovables, por ser a nivel mundial uno de los seis lugares con mayor radiación solar.
La atracción de nuevas inversiones y el generar fuentes de empleos con buenos salarios, se han consolidado en la población, en cuyas cercanías recientemente fue inaugurada la nueva Central Fotovoltaica Autónoma Olaroz Chico con 430 paneles solares que generan 4 veces la energía que consume la comunidad y la cual se ha convertido en uno de los pilares de la nueva estrategia que busca seguir aprovechando el potencial solar de Jujuy. De igual forma se dio a conocer que Olaroz Chico será el primer pueblo solar que se ejecutará entre el 2019 y el 2020 de los 9 proyectados.
Según el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, considera que el proyecto de Olaroz “generará energía en los paneles en un nivel de cuatro veces más de lo que necesita el pueblo para cargar las baterías e implementar un sistema único en el mundo el cual se adapta según la demanda de los habitantes. Eso fue generado con el ingenio e inteligencia de jujeños”, pero además representa más se trata de conocer como funciona el sistema eléctrico más allá de las baterías y los paneles.
Este valor agregado, la alta incidencia solar de la zona, ha generado un cambio de matriz energética en el que ha invertido el gobierno nacional, lo que permitirá que el proyecto sirva de escuela para otras zonas y que a la vez se incorpore el Litio, otro de los elementos distintivos de la zona que contribuirá en gran medida, si es bien aprovechado, a cuidar el planeta. Si se logra la producción de las baterías a partir del litio y del carbonato de litio es un gran logro para lo que sería la soberanía energética.