Shell está comenzando a construir cargadores de alta potencia en sus estaciones de servicio en Alemania. Este año, la compañía petrolera planea construir 50 estaciones de carga en todo el país, con un total de 100 puntos de carga y una capacidad de al menos 150 kilovatios.
Shell ha incorporado a EnBW Energie Baden-Württemberg, una empresa de servicios públicos en el sur de Alemania, como socio para la iniciativa de la red de carga. Planean instalar estaciones de carga de alta potencia con CCS, CHAdeMO y una conexión de CA (tipo 2), que proporcionarán hasta 150 kW para hasta dos vehículos que se cargan simultáneamente y hasta 300 kW cuando solo se está cargando un automóvil. Según los informes de los medios de comunicación, se planean ubicaciones en Colonia, Oberhausen y Munich.
“La importancia de la movilidad eléctrica, sin duda, aumentará en el sector de automóviles de pasajeros”, dice Jan Toschka, director del negocio de estaciones de servicio de Shell en Alemania, Austria y Suiza. La cooperación con EnBW le dará a Shell acceso directo a los conocimientos y años de experiencia de la compañía de energía y del operador de infraestructura de carga. “Tenemos una visión holística del tema de la electromovilidad y aportamos una amplia experiencia en el área de expansión y operación de infraestructura de carga para el proyecto”, confirma Marc Burgstahler, responsable de la electromovilidad en EnBW.
Shell ya ha instalado estaciones de carga rápida en otros países como Gran Bretaña, los Países Bajos y China. Toda una serie de adquisiciones en el sector energético indican que la multinacional petrolera holandesa generalmente quiere establecer un ecosistema completo en el sector de la movilidad eléctrica. En febrero, Shell asumió el control del fabricante alemán de baterías Sonnen, en octubre de 2018 el especialista en infraestructura de carga NewMotion y, a principios de año, la empresa estadounidense Greenlots, que también se centra en este campo. Además, la compañía petrolera se ha unido a la red HPC Ionity y la iniciativa CCS CharIN y es un nuevo inversor en la empresa estadounidense Ample., que se especializa en el intercambio de baterías.
Shell fundó la unidad de negocios “Nuevas energías” en 2016 para avanzar en dos áreas principales: nuevos combustibles para el transporte (como los biocombustibles y el hidrógeno) y la generación de energía desde la compra y venta hasta el suministro directo a los clientes. Para 2020, Shell planea invertir un promedio de 1 a 2 mil millones de dólares al año en dichos proyectos para impulsar estas prioridades.
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