AGL Energy va a cerrar una de las cuatro unidades de la estación “B” de la central térmica AGL Torrens, en el sur de Australia, en un momento en que los generadores tradicionales de combustibles fósiles se enfrentan a la rápida transición a la energía eólica y solar y al abandono de la generación de carga base en favor de la capacidad flexible.
AGL afirmó que la caída de los precios mayoristas de la electricidad, tanto al contado como a futuro, y el aumento de la oferta de electricidad procedente de nuevos generadores -es decir, nuevos proyectos eólicos y solares- están creando “condiciones difíciles” para el generador Torrens B.
El director de operaciones de AGL, Markus Brokhof, dijo que AGL ha tomado la decisión de suspender una unidad tras considerar cuidadosamente la fiabilidad del suministro frente a los cambios en los requisitos de capacidad y los precios.
“Seguiremos proporcionando a los australianos del sur acceso a una electricidad fiable y asequible. Hemos evaluado toda la información disponible públicamente y confiamos en que Australian Energy Market Operator (AEMO) disponga de suficiente capacidad para garantizar la solidez del sistema”, dijo el Sr. Brokhof.
La primera gran batería de AGL
Se prevé que la construcción de la batería de 250MW comience a finales de este año, lo que la convertirá en la primera de las baterías de 850 MW previstas por AGL que se pondrán en marcha.
“Esta nueva batería a escala de red, junto con la central eléctrica de gas de Barker Inlet que comenzó a funcionar en 2019, demuestra nuestro compromiso de desempeñar un papel de liderazgo en la transición energética del estado”, siguió comentando el Sr. Brokhof.
Basándose en el ciclo de mantenimiento de la central térmica, AGL ha identificado la unidad B1 de 200 MW como la más apropiada para ser retirada del servicio. El tiempo previsto para la retirada de la central será de seis meses.
AGL seguirá operando las tres unidades B restantes, junto con la central de gas de Barker Inlet, y revisará la decisión si se producen cambios importantes en las condiciones del mercado.
En Torrens A, AGL ha desactivado tres unidades, y la unidad restante se desactivará este mes de septiembre, y su retirada está prevista para septiembre de 2022.
El anuncio es significativo porque es una señal más de la transición desde la tradicional red de carga de combustibles fósiles de Australia a una basada en las energías renovables y la capacidad flexible, incluido el gas de arranque rápido, aunque también hay cada vez mayores formas de almacenamiento, como las baterías y la hidroeléctrica de bombeo.
Sobre la central de gas AGL Torrens
AGL Torrens, se encuentra a 18 km del centro de la ciudad de Adelaida, en Torrens Island, y es la mayor central eléctrica de Australia del Sur y la mayor central de gas natural de Australia.
La construcción comenzó en 1963 y consta de 8 unidades generadoras: la estación “A”, formada por cuatro unidades, entró en funcionamiento en 1967; la construcción de la estación “B”, también formada por cuatro unidades generadoras, finalizó en 1976.
Tiene una capacidad nominal total de 1.280 MW, la central térmica quema gas natural en las calderas para generar vapor, que luego impulsa las turbinas para generar electricidad. Su producción es suficiente para satisfacer las necesidades anuales de unos 470.000 hogares australianos promedio.
El gas se suministra a través del gasoducto SEAGas desde Victoria y desde Moomba, en Cooper Basin.
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