- Los accionistas de Hess aprobaron la propuesta de adquisición de Chevron por 53.000 millones de dólares.
- ExxonMobil está impugnando el acuerdo en un arbitraje, reclamando un derecho de tanteo sobre la participación de Hess en un yacimiento petrolífero de Guyana.
- El procedimiento de arbitraje podría prolongarse hasta 2025, lo que podría hacer descarrilar la fusión.
Los accionistas de Hess Corporation aprobaron la propuesta de Chevron de adquirir todas las acciones por valor de 53.000 millones de dólares, lo que marca un hito importante en el proceso de fusión.
Esta aprobación se produce a pesar del arbitraje en curso entre ExxonMobil y Chevron sobre el derecho preferente de compra que reclama Exxon sobre la participación de Hess en el bloque Stabroek, un activo clave en los prolíficos yacimientos petrolíferos de Guyana.
La propuesta de Chevron de adquirir Hess se ha enfrentado al escrutinio de reguladores y políticos, ya que Exxon ha hecho valer su derecho a igualar preferentemente la oferta de Chevron debido a su participación del 30% en el bloque Stabroek.
La disputa ha complicado la fusión, y en marzo Exxon solicitó un arbitraje en la Cámara de Comercio Internacional de París. Exxon prevé que el procedimiento de arbitraje podría prolongarse hasta 2025.
El CEO de Hess, John Hess, se mostró optimista tras la votación: «Nos complace que la mayoría de nuestros accionistas reconozca el atractivo de esta operación estratégica y esperamos que nuestra fusión con Chevron se complete con éxito».
Agregó: «Juntos nos posicionaremos como una empresa energética integrada de primer orden, con el liderazgo, la cartera de activos y los recursos financieros necesarios para aportar un valor significativo a los accionistas en los años venideros».
A pesar de la aprobación de los accionistas, persisten importantes retos. Institutional Shareholder Services, una empresa de asesoramiento de apoderados, había recomendado abstenerse en la votación, alegando su preocupación por la valoración de la operación y los posibles retrasos introducidos por el arbitraje con Exxon.
Algunos inversores, incluidos grandes accionistas como D.E. Shaw, se habían abstenido, argumentando que la fusión infravalora los activos de Hess y no aborda adecuadamente el impacto del arbitraje.
Si el argumento de Exxon prevalece en el arbitraje, podría descarrilar la fusión invocando su derecho a adquirir los activos de Hess en Guyana, cuyo valor se estima en 40.000 millones de dólares o más.
Este resultado podría desencadenar una comisión de ruptura de unos 1.700 millones de dólares adeudada por Hess a Chevron, lo que complicaría futuros intentos de adquisición.
La aprobación de la votación subraya la confianza de los accionistas en el valor estratégico de la fusión, a pesar de las incertidumbres que se ciernen sobre ella.
Noticia tomada de: Oilprice.com / Traducción libre del inglés realizado por worldenergytrade.com